"Un éxito", afirma Isaac Gutiérrez, secretario xeral de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT en Pontevedra, al analizar la jornada de huelga convocada por las centrales sindicales CCOO, CIG y UGT en el sector de transporte colectivo por carretera durante este viernes 31 en toda Galicia.
Así se comprobaba durante toda la jornada en la estación de autobuses de Pontevedra donde apenas había movimiento de pasajeros y tampoco se acercaban autobuses a las cocheras.
Los pasajeros tuvieron que buscarse otras alternativas para sus desplazamientos, mayoritariamente el tren y, en algunos casos, taxis o coches particulares compartidos.
"Estamos estudiando por parte de todos los sindicatos denunciar los servicios mínimos", afirma Gutiérrez al entender que la Xunta de Galicia ha establecido unos criterios "abusivos" en esta huelga.
A pesar de la tensión por los servicios mínimos marcados, la jornada transcurrió sin incidencias y los piquetes trasladaban la información a los conductores de autobuses que intentaban realizar los trayectos establecidos en esos servicios mínimos. Isaac Gutiérrez se mostraba "contento por la participación porque es un sector al que siempre le ha costado unirse en la provincia".
Los trabajadores del sector protestan porque los sueldos no se actualizan en los últimos años y la patronal solo ofrece un incremento de un 0,8% de los salarios en las negociaciones, una cifra que les parece insuficiente a los representantes sindicales, que reclaman a la Xunta de Galicia su intervención en el conflicto y denuncian la adjudicación a la baja en los concursos de los servicios de transporte.
"Hoy hemos medido las fuerzas", afirma Gutiérrez, "si la semana que viene hay suerte habrá contacto con la patronal, si no iremos planificando una nueva huelga", concluye.