"Hoy es un día de fiesta" en A Illa de Arousa. Así si contundente se ha mostrado el alcalde, Luis Arosa, tras confirmarse que el Concello adquirirá, a través del Plan Nacional sobre Drogas, dos parcelas que fueron propiedad de Marcial Dorado.
Los terrenos, situados en la Avenida da Ponte y en el Monte do Outeiro, tienen una superficie de unos 3.000 metros cuadrados cada uno y están valorados conjuntamente en 361.000 euros.
Estas dos parcelas, según ha avanzado Arosa, serán dedicadas a la construcción de un bloque de unas setenta viviendas sociales y de un parque público.
Se sumarán a la ya adquirida en la zona de O Testo, donde está previsto hacer el pabellón de deportes.
El alcalde, con respecto de la parcela de la Avenida da Ponte donde se construirán las viviendas, ha explicado que "no podía caer en la especulación urbanística", dado que es un solar "muy atractivo" al tener una edificabilidad de bajo, dos plantas y bajo cubierta, la máxima permitida en A Illa.
Ha destacado que estas setenta viviendas sociales serán una gran ayuda para fijar población en un municipio que, por sus características, "tiene muy poco suelo edificable".
El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, que visitó los terrenos acompañando al alcalde, ha asegurado que la recuperación para el pueblo de A Illa de Arousa de estas dos parcelas "no sólo es un acto de justicia social, sino, sobre todo, un acto de justicia poética".
"No se me ocurre mejor fin para dos propiedades confiscadas por el Estado a Marcial Dorado", ha afirmado Losada, que ha garantizado la colaboración del Gobierno de España con el Concello de A Illa de Arousa para materializar todas estas actuaciones.
A este respecto, ha celebrado el acuerdo con el Plan Nacional sobre Drogas para que estas dos propiedades pasen a la titularidad municipal en lugar de ser subastadas al mejor postor.
Además, el subdelegado ha reiterado que "toda Galicia y toda España debe saber" que las viviendas públicas que se van a construir "salieron del patrimonio ilegal del señor Marcial Dorado", al que según ha añadido "todos conocíamos bien en Galicia".
"En su día, tenía algún compañero de viajes que luego llegó a presidente de la Xunta y que lo que hizo durante 14 años fue una auténtica huelga de brazos caídos en todo lo que tiene que ver con las políticas de vivienda pública", ha censurado el representante gubernamental.