El fin del estado de alarma, que decaerá a las 00:00 horas del domingo 9 de mayo, abrirá una situación nueva en Galicia. Así lo ha anunciado el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, que ha detallado las nuevas medidas que entrarán en vigor.
No habrá toque de queda y se levanta el cierre perimetral de la comunidad. Es decir, no habrá límites a la movilidad en Galicia. Cualquier ciudadano podrá entrar o salir del territorio gallego sin restricción alguna. Eso sí con excepción: los municipios en riesgo extremo.
Aquellos ayuntamientos que tengan una incidencia a 14 días superior a 500 o una incidencia a 7 días a 250, automáticamente quedarán cerrados. Además, habrá toque de queda a las 23:00 horas. Eso sí, esta decisión tendrá que ratificarla el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
Actualmente estarían afectados cinco municipios gallegos, entre ellos Cambados y Vilanova.
Esta apertura a la movilidad, según Núñez Feijóo, es lo que más preocupa a las autoridades sanitarias ante la posible llegada de viajeros de zonas de alta incidencia.
Para ellos será obligatorio anotarse en el registro de viajeros. Serán llamados para un cribado, salvo que acrediten haber sido vacunados, tener anticuerpos por haber superado la enfermedad o traer una PCR negativa. Habrá puntos de cribado en los tres aeropuertos.
La incidencia de la pandemia, que lleva 14 días por debajo de los 100 casos por cada 100.000 habitantes, permitirá además continuar la desescalada.
Así, todo el comercio retomará sus horarios habituales y también se ampliarán los permisos para la actividad de la hostelería. Los bares podrán abrir a partir de ahora hasta las once de la noche, mientras que los restaurantes podrán hacerlo hasta la una de la madrugada.
Las limitaciones de aforo serán las mismas. Solo podrán reunirse cuatro personas en el interior de los establecimientos y seis personas en las terrazas. A mayores, Galicia prohibirá la reunión de no convivientes en domicilios entre las 01:00 horas y las 06:00 horas.
Esta última decisión, que necesitará también aval judicial, se adopta para que los ciudadanos "non substitúan a hostalería profesional pola hostalería doméstica".
A pesar de este paso hacia la normalidad, Núñez Feijóo ha recordado que el "exercicio de responsabilidade" social no ha terminado porque "só acaba o estado de alarma pero non remata a pandemia" y entenderlo de otra manera "sería un gravísimo erro".
"Estamos dando pasos que todos desexábamos e temos que conseguir que se queden e non vaiamos para atrás", ha señalado el presidente gallego, que ha recordado que a partir del 9 de mayo "afrontamos o mesmo risco que antes pero con peores instrumentos para xestionala".
A este respecto, Feijóo ha censurado que el Gobierno central no haya querido legislar para mantener un mayor control sobre la gestión de la pandemia, lo que abre "moitas incertezas" al situar a los jueces ante una situación "complicadísima" al actuar como epidemiólogos.