Alrededor de las nueve de la noche, el coche oficial dejaba a la ministra Ana Pastor justo a la entrada del edificio Sarmiento mientras en la esquina de Cobián Roffignac un grupo de apenas treinta afectados por las preferentes hacían sonar sus bocinas y silbatos. Más de veinte agentes de la Policía Nacional mantenían un cordón en torno al edificio museístico para garantizar la protección de las autoridades. Dentro se encontraban, entre otros, la presidenta del Parlamento autonómico, Pilar Rojo, el presidente de la Deputación, Rafael Louzán y el alcalde Miguel Anxo Fernández Lores para asistir a la presentación del último número de la revista Gallegos en la que se incluye un especial sobre la figura del arquitecto Alejandro de la Sota.
El acto se desarrolló con el sonido de fondo de los cánticos de los afectados. El alboroto llevó a que Rafael Louzán en su discurso se solidarizase con las víctimas de la estafa de las preferentes pero indicó "teñen que saber que a actividade diaria dunha institución se ten que desenvolver con absoluta normalidade. E vaise desenvolver con absoluta normalidade". En su intervención, la ministra Ana Pastor hizo una leve referencia a la situación actual: "solo los valientes salen adelante en las dificultades".
Mientras esto sucedía en el interior, en la calle los afectados entonaban cánticos con letras como "non pararemos ata que cobremos e pola quita non pasaremos". Los manifestantes, conocedores ya de que sus títulos de NovaGalicia Banco perderán el 43% de la inversión realizada, decidieron quedarse aguardando al final del acto en el Sarmiento al grito de "Non temos présa".
Cerca de las 10:30 de la noche, los vehiculos oficiales en los que viajaban las principales autoridades, entre ellas la ministra Ana Pastor, abandonaban el Museo. Los agentes de la policía formaron un amplio cordón de protección a lo largo de la Travesía Padre Amoedo. Fue entonces cuando se produjo el mayor momento de tensión de la noche. Dos de las afectadas en un evidente estado de nerviosismo increparon a los agentes e intentaron avalanzarse contra los vehículos sin lograr sobrepasar la muralla policial mientras gritaban: "Ladróns, que sodes uns ladróns. ¿Dónde está la justicia?". Ambas fueron calmadas por otros manifestantes y en apenas unos minutos la policía abandonó el lugar mientras los afectados organizaban los actos de protesta previstos para este sábado 23.