La Morada de Cobres reunirá a las estrellas del Entroido tras meses de esfuerzo y dedicación

Vilaboa
27 de marzo 2025

La Asociación Cultural Cobres celebra este sábado su tradicional fiesta de agradecimiento a madamas, galáns, músicos y colaboradores que mantienen viva una tradición con siglos de historia

Domingo de Entroido en Cobres
Domingo de Entroido en Cobres / Concello de Vilaboa

Este sábado 29 de marzo, la parroquia de Cobres, en Vilaboa, vivirá una jornada especial con la celebración de la Morada, un evento que pone el punto final al Entroido y que sirve como reconocimiento a todas aquellas personas que hacen posible esta fiesta centenaria.

La carpa instalada en Riomaior acogerá desde las 13:30 horas una sesión vermú que dará paso a una comida de confraternidad, en la que se reunirán madamas, galáns, músicos y numerosos colaboradores que durante todo el año trabajan para preservar esta tradición que se remonta al siglo XVII.

"É o único día no que desfrutamos da festa", explica Martín Duarte, presidente de la Asociación Cultural Cobres, quien destaca el intenso trabajo que se desarrolla durante todo el año: "O resto do tempo temos reunións semanais, ensaios, planificación dos eventos e saídas ás que levamos o Entroido de Cobres".

El esfuerzo físico y la dedicación de los protagonistas del Entroido de Cobres es extraordinario. Durante las cuatro jornadas principales de la fiesta, madamas y galáns permanecen en pie más de ocho horas diarias, acumulando un cansancio que, a pesar de la experiencia de muchos de ellos, los sitúa "ao borde do esgotamento físico", según señalan desde la asociación.

La Morada actual, con carpa y catering, representa la evolución de una tradición que se mantiene viva desde hace siglos. Lidia Peleteiro, integrante de la directiva de la asociación, recuerda que originalmente esta celebración se hacía con los alimentos que las familias entregaban al Entroido cuando iban a pedir, y añade que "había quen cedía unha vaca para facer estas comidas".

Con el paso del tiempo, el formato fue cambiando. Primero se contrató a un cocinero mientras las familias de galáns y madamas ejercían de auxiliares, y actualmente la celebración está abierta a todas las familias y vecinos que colaboran en la conservación de esta fiesta, que constituye "un sinal de identidade para Vilaboa e especialmente para Cobres".

La jornada del sábado se prolongará durante toda la tarde con hinchables para los más pequeños y animación musical, creando un ambiente festivo que servirá para agradecer el esfuerzo colectivo que hace posible mantener viva esta tradición.

La elaboración de los gorros, la indumentaria de cada madama y galán, los complementos, los traslados y todos los gastos que implica mantener esta actividad durante todo el año "sería impensable sen a implicación e as renuncias das familias", destacan desde la asociación.

La Morada será un acto de reconocimiento a toda la comunidad que trabaja conjuntamente para preservar el patrimonio cultural inmaterial del Entroido de Cobres, que suma siglos de bagaje.