Hasta 300.000 euros lleva invertidos el Concello de Marín en diferentes conceptos para mantener la seguridad y la higiene en los arenales del municipio. Una cantidad que en este verano se ha incrementado ostensiblemente dadas las circunstancias que conlleva la pandemia de la COVID19.
Con esta partida económica, la administración local pretende ofrecer unas playas que sean lo más seguras posible, cumpliendo todas las medidas recomendadas.
La partida de mayor cuantía se destina los equipos de socorrismo que llevan un inversión de 97.889 euros. A mayores, el Concello adquirió tablas de rescate para los socorristas por un importe de 2.931 euros.
La segunda consignación más cuantiosa es la que corresponde a limpieza y mantenimiento, con un presupuesto superior al de años anteriores y que se cifra en 58.612 euros; y la tercera para la creación de unidades de vigilancia especial con patrullas de la Policía Local y servicios extraordinarios que supone 29.137 euros.
Relacionadas igualmente con la coyuntura sanitaria del coronavirus están otras partidas dirigidas a concienciar e informar a los usuarios de la playas. Así, se han derivado 3.751 euros para equipos de megafonía; 3.611 euros en herramientas cartográficas para el cálculo de aforo en playas y 1.626 euros en lonas de advertencia.
Finalmente, se aumentaron las dotaciones económicas para la adquisición de material sanitario, con un total de 3.630 euros y 2.057 euros para equipos desfibriladores automáticos. Otros 2.291 euros en una pasarela enrollable para acceso a la playa.
Además de la citada consignación de limpieza y mantenimiento, los trabajos anuales habituales de mantenimiento y puesta a punto supusieron otros 55.274 euros para acondicionar arena, balizamiento, desbroce, y vaciado de fosas sépticas.