Más de 8.000 pontevedreses, según los datos de la Xunta de Galicia, tienen alguna discapacidad sensorial, motora o cognitiva. Es uno de cada diez ciudadanos de Pontevedra y para ellos, denuncia Marea, las fiestas no son iguales que para los demás por las dificultades que encuentran para poder disfrutar de las actividades que se programan.
Teresa Casal, número 2 de Marea para las municipales, ha denunciado que el Concello "non conta" con las personas con discapacidad para participar o disfrutar de sus fiestas, la más inminente el Entroido. Así lo ha asegurado acompañada de Herminia Dios, coordinadora del área social de la formación y de César Maquieira, activista por la movilidad universal.
La exteniente de alcalde ha lamentado que haya personas que no pueda acudir a parte de los eventos que se celebran en Pontevedra, por lo que ha reclamado un esfuerzo por parte del gobierno municipal para que la ciudad sea "accesible e inclusiva" para todos sus habitantes.
Herminia Dios, por su parte, ha recordado que las personas con discapacidad "non son cidadáns de segunda", ya que "teñen os seis dereitos e estamos obligados a garantirllos", para evitar que aquellos que tengan necesidades especiales "non queden fóra das festas".
Así, apunta que el programa de las fiestas, imitando a otras localidades como Bilbao, cuente con su propia traducción al braille o que contengan pictogramas. Además, Marea reclama que se incluya información que permita saber si las personas con estas necesidades pueden participar en los eventos programados y en qué condiciones.
Entre sus peticiones, Marea incluye que en los desfiles de Entroido, Reyes Magos o en la Batalla de Flores se habiliten espacios específicos para que los pontevedreses con movilidad reducida puedan verlos desde primera fila, ya que el sistema actual es "inviable" para ellos; o que en los conciertos de verano se instalen plataformas más accesibles y baños que estén adaptados.
César Maquieira ha recordado que el Concello debe promover iniciativas que sean inclusivas "e non segregacionistas" para evitar la "desconexión" que padecen actualmente muchas personas, apostando por una inclusión "que sea real".
"Unha cidade ten que ser para todos", ha recordado Teresa Casal, que defiende que todos los pontevedreses "estamos orgullosos" de la ciudad, mientras que el actual alcalde "non quiere a todas as persoas de Pontevedra" como demuestra, ha dicho, su desinterés por este colectivo.