Nuevo episodio en el conflicto entre vendedores ambulantes y el Concello de Pontevedra. Después de llevar el asunto al Juzgado por la prohibición de montar sus puestos el pasado sábado en la Alameda, el colectivo de vendedores ha llevado a cabo a última hora de la tarde de este jueves una concentración de protesta en la Alameda.
Se quejan por su vuelta a Rafael Areses, ubicación es la que está recogida en la ordenanza y el lugar en el que el gobierno de Pontevedra que encabeza Miguel Anxo Fernández Lores quiere devolverlos después de que el anterior gobierno bipartito los autorizase a montar el mercadillo de los sábados por la mañana en la Alameda.
Los ambulantes se niegan a regresar a la orilla del río y están dispuestos a luchar para conseguir quedarse en el centro de la ciudad.
Alegan los ambulantes, a través de su portavoz Margarita González, que en la Alameda "no hay nada" que les impida continuar, al menos, hasta las Festas da Peregrina "y luego hay dos fines de semana libres hasta la Feira Franca" y lo mismo pasa con el triatlón. "Es simplemente un capricho político del señor Lores", subraya la presidenta del colectivo.
En la protesta participaron buena parte de los 55 comerciantes que integran el colectivo, concentrándose en este céntrico parque para leer un manifiesto y dirigirse a pie hacia la calle Michelena para concentrarse delante de la sede del Concello, ante la que volvieron a repetir sus proclamas y buscaron el apoyo de la ciudadanía con una recogida de firmas.