La plantilla de la fábrica de Tafisa en Ponte Caldelas ha decidido en asamblea iniciar un calendario de protestas para intentar evitar que la dirección de la empresa cierre la nave situada en el polígono de A Reigosa.
Durante más de cuatro horas que duró la asamblea convocada para la tarde de este lunes 19, tres días después de que la dirección anunciara la decisión de cerrar la empresa por causas económicas, los sesenta empleados de la factoría han decidido intentar quemar hasta el último cartucho para que la nave continúe en funcionamiento.
Según explicaba el presidente del comité de empresa, José Manuel Moledo, "la esperanza es lo último que se pierde y, por la experiencia que tenemos en esta fábrica, la planta es viable". Moledo indicó que la si este mes siguiera de manera normal, el balance de cuentas cerraría con números positivos: "sospechamos que la empresa no tiene muchas ganas de luchar por esto" y añadió que la excusa económica no se sostiene en este momento.
Los representantes sindicales temen que la falta de carga de trabajo que sufre la factoría alemana, la resolverían con los encargos que tienen actualmente aquí. "Hoy se está trabajando una cartera de pedidos amplio", indicó el presidente del comité.
A lo largo de los próximos días tienen previsto iniciar una ronda de entrevistas con el alcalde de Ponte Caldelas, Perfecto Rodríguez; el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores y con el presidente de la Deputación, Rafael Louzán, con la intención de que puedan forzar a la empresa a dar marcha atrás en sus pretensiones de cierre.
Además, Moledo indicó que el personal de la fábrica quiere llevar a cabo actos de protesta que anunciarán el próximo miércoles 21.