La ministra "pontevedresa" de Fomento, Ana Pastor, se ha convertido en la última esperanza para evitar el cierre de los cines de Vialia. Los 15 trabajadores, a través del sindicato Comisiones Obreras, han solicitado entrevistas con el presidente de la Deputación Provincial y con el alcalde de Pontevedra para que soliciten a la ministra de Fomento su intervención y así la entidad pública ADIF, propietaria de las instalaciones, evite el juicio para el desahucio previsto para el 20 de mayo.
La deuda que Ábaco Cines, la empresa que gestiona los Cinebox de Vialia, asciende a 800.000 euros. El secretario comarcal de Comisiones Obreras, José Luis García Pedrosa, afirmó que este miércoles había mantenido una reunión a las puertas de los cines con el director general de Ábaco, Juan Ignacio Moreno, que le confirmó la intención de la empresa de continuar manteniendo la actividad en los cines si se logra una nueva negociación de las condiciones del alquiler y de la deuda con ADIF. Pedrosa indicó que "os cines seguirían abertos se atopan algunha solución para hibernar a débeda e negociar un novo contrato de aluguer".
Los trabajadores, representados por Esther Moure, afirman que los cines son económicamente viables porque cuentan con una afluencia de 2.000 espectadores a la semana. Sin embargo, desde la empresa se comunicaba a los sindicatos que los beneficios no son suficientes para pagar el alquiler ya que su prioridad es no contraer deudas con los distribuidores y con el personal. En este sentido, Esther Moure confirmó que las nóminas de los trabajadores siempre han sido pagadas al día.
En la actualidad, los sindicatos y trabajadores desconocen la cifra que Ábaco está pagando por el alquiler de las instalaciones. En 2007, la cantidad ascendía a 12.000 euros mensuales.
En caso de que se produzca el cierre, Ábaco también contempla la posibilidad de negociar la deuda con ADIF para dejar todo el material en las instalaciones que permita que otra entidad continúe con el negocio. De lo contrario, las instalaciones quedarían vacías y, según cálculos de Ábaco, sería necesaria una inversión de 2,5 millones de euros para poder abrir unos nuevos cines.
Según Comisiones Obreras, en estos momentos, se desconoce que haya alguna otra empresa gestora de cines que esté interesada en estas ocho salas.
De esta forma, Pontevedra podría convertirse en unas semanas en la segunda capital española sin cines después de que hace apenas cinco días se cerraran las de Soria.