"Que metan a Rueda nas listas de espera", cantaba un grupo de personas este mediodía delante de la entrada del Hospital Provincial en una concentración en la que reclamaban una sanidad pública de calidad.
Convocados por el Colectivo de Xubilados e Pensionistas de la CIG, estas personas reivindicaban sus derechos como pacientes de edad avanzada en la atención sanitaria.
Xosé Lois Portabales Magariños, portavoz del colectivo, afirmaba que las personas de edad avanzada se encuentran en una situación de vulnerabilidad en cuestiones como la solicitud de citas en Atención Primaria.
"Hai que entrar por Internet e estamos un pouco desfasados. Por teléfono, moitas veces faise por recoñecemento de voz e a xente non o entende", afirmaba Portabales para reclamar un trato más personalizado como el que existía años atrás.
"Unha persoa maior por internet é imposible a non ser que llo faga un fillo ou un neto. E se non hai fillo ou neto, ten que acudir a un veciño? Vas a un centro de saúde e din que pidas cita por internet e unha persoa maior non sabe entrar", explica el representante sindical.
Manifiestan también sus quejas por el tiempo de espera tanto para las citas de atención primaria como para las consultas con especialistas o para intervenciones quirúrgicas. "Unha persoa maior ten que esperar quince días por unha cita co médico de cabeceira", explica señalando que una persona joven igual puede esperar pero una persona mayor presenta más riesgos de salud.
En relación con los especialistas recuerda que antes la cita la gestionaba directamente el médico de familia: "agora non. Agora estás agardando seis meses ou un ano", explica Xosé Lois Portabales, "agora chama por teléfono e avisan con quince días de antelación á cita, así din que non hai lista de espera, pero non é certo".
Señalan que con edades avanzadas el retraso en la atención sanitaria puede causar pérdida de movilidad o en las capacidades de determinados sentidos con la posibilidad de sufrir problemas cognitivos o funcionales.
Anuncian que realizarán una protesta en Santiago de Compostela a través de la CIG para intentar forzar encuentros con las autoridades sanitarias para que reconozcan los derechos de las personas mayores en la sanidad pública.