Los jardines de la UNED en Monte Porreiro, a un último paso de tener uso público y acceso libre

Pontevedra
23 de octubre 2021

El Concello destinará más de 150.000 euros al proyecto para poner en valor y abrir al público el parque de la Uned en Monte Porreiro, que contempla la conexión con el Mirador mediante la creación de una plataforma única elevada para el calmado de tráfico en el entronque de la Uned con las calles Italia, Francia y Dinamarca

Proyecto para los jardines de la UNED
Proyecto para los jardines de la UNED

La Xunta de Goberno Local del próximo lunes dará un paso decisivo para que el parque de la Uned en Monte Porreiro pase a tener uso público y libre acceso. Abordará la aceptación de su cesión al Concello. 

Este trámite permitirá desbloquear dos licitaciones esenciales para el Concello de Pontevedra en este mandato: la del proyecto para poner en valor y abrir los jardines del centro asociado al uso y disfrute de la ciudadanía y la del concurso para el nuevo contrato municipal de conservación y mantenimiento de zonas verdes (que incluye por primera vez a la urbanización). 

El proyecto para estos jardines upondrá una inversión de 151.250,19 euros. Se trata de una aportación económica contemplada dentro de la última modificación de crédito realizada por el equipo de Gobierno.

El concejal de Desarrollo Sostenible y Medio Natural, Iván Puentes, dio a conocer este sábado los primeros planos de los trabajos previstos y recordó que el Concello firmó en el primer semestre de este año con el consorcio responsable de la gestión del centro asociado el convenio de cesión para la apertura de sus espacios ajardinados, lo que, tras la aprobación de la misma, se materializará en una cesión a cuatro años con posibilidad de prórroga.

Puentes señala que el objetivo de este acuerdo es garantizar el uso público y libre acceso a los jardines y hacer posible un uso mixto de los mismos, tanto para los estudiantes y personal de la Uned cómo para los vecinos de Monte Porreiro y la ciudadanía pontevedresa en general. 

Como condición para esta apertura, la Concejalía de Desarrollo Sostenible se comprometió a redactar y ejecutar un proyecto de paisajismo y a asumir las tareas de seguridad y vigilancia, limpieza, mantenimiento y conservación del parque, desarrollando plantaciones de árboles, trabajos de jardinería, recuperación de aceras y caminos, instalación de mobiliario y señalización de sendas y elementos singulares, así como actividades lúdicas y deportivas. 

El proyecto tiene entre sus objetivos prioritarios el de abrir físicamente el parque y hacer posible el acceso peatonal por las calles Italia y Francia, vinculándolo al barrio de Monte Porreiro y a O Mirador. Así, prevé la creación de una plataforma única elevada en el entronque de la actual zona de acceso al estacionamiento del centro asociado con las calles Italia, Dinamarca y Francia

El parque de la Uned ocupa una extensión de 22.230 metros cuadrados. En su día, estos jardines formaron parte de la villa ‘Buenos Aires’, cuyo propietario fue Casimiro Gómez. Compró los terrenos en 1900 y desarrolló un proyecto pionero con una importante repercusión para la ciudad de comienzos del siglo XX. La parcela original tenía una extensión de 70 hectáreas y en un comienzo su actividad principal estaba vinculada a las aguas termales y a los manantiales existentes.  Tras la I Guerra Mundial, la actividad de la hinca fue reorientada hacia una granja experimental.

Los jardines del centro asociado de la Uned ocupan parcialmente los mencionados jardines románticos, denominados parque de Buenos Aires en la cartografía de 1906 contenida en el libro El balneario del Lérez. La aventura de Casimiro Gómez.

NUEVO CONTRATO DE JARDINES

El trámite de este lunes desbloqueará la licitación del nuevo contrato de jardines y zonas verdes, para el cual la Concejalía de Desarrollo Sostenible destinó un presupuesto que supera el millón de euros (frente a los 700.000 euros del actual), incorporando nuevas zonas que no estaban incluidas, como parte del campus universitario (fruto del convenio para la ejecución del skate  park), el contorno del Pazo da Cultura (de la que se encargaba hasta ahora el propio organismo) y, sobre todo, el barrio de Monte Porreiro.