El silencio reina en Valdecorvos. En una de las parcelas de esta zona situada en las proximidades de Mourente hace dos años que tendrían que estar construidos 14 chalets de protección oficial. Sin embargo, en junio de 2015 lo único que hay es un paraje verde con un letrero oficial de Xestur (Xestión do Solo de Galicia) y una pancarta de los afectados que reclaman el dinero invertido en estos terrenos. A cien metros un caballo blanco se alimenta entre los helechos.
Varios de los cooperativas se arremolinan en esa zona durante esta tarde del miércoles 17. Pedro Mariño es el portavoz y se muestra cauto ante la promesa de los últimos días por parte de Xestur de que se buscará una solución satisfactoria para todas las partes. "Pero non temos ningunha garantía, ningunha data", afirma Mariño al indicar que todavía desconocen en qué consistirá esta solución.
En 2010, estos ciudadanos entraron en una cooperativa de viviendas de protección oficial con la intención de que en 2013 esos chalets adosados estuvieran construidos. Sin embargo, las obras nunca se iniciaron por, entre otras causas, falta de financiación. Los cooperativistas afirman que ellos invirtieron hasta 52.000 euros a través de Xestur en la compra de los terrenos. Ahora reclaman una cantidad superior a 300.000 euros y el tema ha sido denunciado ante los tribunales. El 8 de mayo se aplazó el juicio sin que se haya fijado una nueva fecha para la vista.
Mariño afirma que "a xente está máis que desesperada" por las dificultades que tienen para llegar a fin de mes, después de haber invertido sus ahorros en un proyecto que, pasado el tiempo, no ha visto la luz. Ninguna de las 14 familias, afirma el portavoz, tiene depositadas sus ilusiones en estos terrenos y por eso han buscado viviendas en otros puntos "lonxe de aquí". Solo quieren recuperar su dinero.
Iniciaron una campaña de recogida de firmas en Change y van a hablar con nuevas fuerzas políticas con representación en el Concello de Pontevedra. Esperan que Xestur les cite para ofrecerles una solución por escrito que conlleve la devolución del dinero invertido. De lo contrario, amenazan con incrementar los actos de protesta.
Por su parte, la empresa Gescomar afirma que tiene intención de continuar con este proyecto para el que están buscando financiación.