César Mosquera, vicepresidente de la Deputación de Pontevedra, señalaba este miércoles que las excavaciones que se acometen en el claustro de Santa Clara ofrecen la aparición de numerosos enterramientos a distinto nivel en diversos puntos del recinto conventual.
El representante provincial manifestó que este espacio es una "auténtica caixa de sorpresas" al señalar que, además del cementerio datado en el siglo XX, distintas zonas eran utilizadas para la inhumación de cadáveres como la huerta, el claustro, el interior de la iglesia, debajo de la entrada o el refectorio utilizado posteriormente como cuadras.
Señaló que no se van a excavar todas las zonas en las que se detectan restos humanos a través del geo-radar. En el lateral del claustro se identificaron 26 enterramientos, todos ellos con sudario y no en cajas. Se trata de cuerpos de distintas épocas, incluso previos al siglo XVI. En este sentido, César Mosquera apuntaba que además de las monjas también eran enterradas otras personas de fuera del convento que, por ejemplo, habían cedido pertenencias a las clarisas.
Realizando cálculos Mosquera señaló que el número de soterramientos en el convento a lo largo de sus 750 años de historia supere con creces los 2.000 cuerpos, pero la cifra concreta es muy difícil determinarla, explicó.
También aparecieron inscripciones con fechas y el vicepresidente provincial anunción que la Deputación está a punto de realizar una reconstrucción del convento por siglos, indicando cada uno de los cambios que se registraron en este edificio. Apuntó que la entrada original se encontraba en la zona frente a Barcelos, en el punto contrario al acceso actual al convento. Posiblemente, señaló, esa entrada se mantuvo hasta el siglo XVII.
Los trabajos de análisis de este recinto muestran los numerosos cambios que experimentó a lo largo de su historia. César Mosquera expone que cambios tan profundos son poco habituales en otros conventos similares.