César Mosquera avanzó este miércoles que "prácticamente todas" las comunidades de montes del municipio de Pontevedra se han dirigido al gobierno municipal para colaborar con el proyecto de la planta de compostaje y beneficiarse de su funcionamiento. Los contactos se habrían producido en los últimos días y en ellos no han participado "obviamente" los comuneros de Ponte Sampaio, los únicos que han mostrado su oposición a esta iniciativa.
El edil del BNG explicó que estas conversaciones se enmarcan en los trabajos que, en relación al funcionamiento de la planta de compost, está realizando el Concello de Pontevedra.
En este sentido, las comunidades de montes habrían mostrado su disposición de llegar a un acuerdo para poder beneficiarse de este proyecto. Para poder fabricar el compost, la planta necesita lo que se denomina estructurante, es decir restos de poda y residuos vegetales. Los comuneros pontevedreses están dispuestos a facilitárselo, a cambio de que los responsables de la planta limpien sus montes.
Estas tareas de limpieza son muy costosas para las comunidades de montes que, de esta forma, aliviarían sus respectivas situaciones económicas. Se calcula que, de media, asumir esta responsabilidad supone unos 100.000 euros para cada colectivo.
Mosquera negó que con esta medida el Concello pretenda "comprar" la voluntad de los comuneros pontevedreses. Recordó que, desde el año 2006, el gobierno municipal consciente de la importancia ambiental del monte comunal del municipio, ha invertido en ellos unos tres millones de euros. Una colaboración que continuará con la firma de un nuevo convenio, prevista para este viernes, con la Mancomunidad de Comunidades de Montes de Pontevedra.