La alcaldesa de Sanxenxo, Catalina González, se reunió este lunes con la Asociación de Confrarías do Fondo da Ría, quienes manifestaron su preocupación ante la necesidad de acometer el saneamiento de la zona de Raxó, en Poio, con la construcción de una depuradora de aguas residuales.
La regidora local manifestó su acuerdo con la urgencia de solventar esta situación, pero explicó la postura del Gobierno sanxenxino, que defiende que le corresponde al Ejecutivo poiense solucionar esta carencia.
Durante el encuentro, Catalina González insistió, pues, en que el emplazamiento propuesto por el alcalde del municipio limítrofe, Luciano Sobral, en Pampaído "non é unha opción factible porque non lle corresponde aos veciños de Dorrón asumir os problemas dos de Poio".
"Para min é unha satisfacción a implicación que amosaron os colectivos á hora de buscar eles mesmos unha situación idónea que despois lle presentarán ao goberno de Poio para pedírllelo seu apoio", apuntó la alcaldesa.