Motivos "técnicos". Es la razón a la que se aferra la Xunta de Galicia para justificar la polémica decisión de dejar al Ateneo de Pontevedra fuera del reparto de los 29 locales del edificio administrativo de la calle Benito Corbal.
La secretaria xeral técnica de la Vicepresidencia Segunda, Elena Muñoz, respondió este argumento este jueves ante una pregunta del diputado del BNG Luis Bará en el Parlamento de Galicia.
El BNG llevó la situación del Ateneo a la Comisión primera del Parlamento acusando a la Xunta de una "interpretación sesgada y errónea" de la memoria entregada por este colectivo pontevedrés dentro del proceso de adjudicación de los locales de Benito Corbal y, en respuesta, la responsable de la Administración se aferró a esos motivos técnicos.
Luís Bará considera que la Xunta dirigió el proceso de adjudicación de los espacios para "beneficiar" a determinadas asociaciones próximas a la línea ideológica del Partido Popular, entre ellas, Red Madre, una organización "antiabortista que forma parte del ultraconservador Foro de la Familia" y que fue promovida y protegida en Galicia mediante una ley, de iniciativa popular, que blinda sus actividades.
Elena Muñoz niega estas consideraciones y defendió el proceso "reglado" realizado por funcionarios de la administración atendiendo a esos citados criterios "técnicos". Alegó que los criterios son responsabilidad de una comisión de expertos cuya valoración es aceptada por la Xunta y lamentó que el Ateneo de Pontevedra fuera excluido de esta valoración.
"No se entiende que el Ateneo no entre en una relación de 29 colectivos beneficiarios del reparto”, criticó Bará, que añade que "hay 36 solicitudes, 29 locales y resulta que el Ateneo queda fuera entre entidades religiosas y otras que ni siquiera tienen su sede en Pontevedra o en su ámbito de influencia”.