Representantes de los sectores productivos y de los concellos de Pontevedra, Marín y Poio acudieron este martes en la reunión de gran contenido técnico con las conselleiras de Medio Ambiente y de Mar, en la tercera reunión de seguimiento del Plan de Saneamiento de la Ría.
En el encuentro la conselleira Beatriz Mato dio cuenta del trabajo que lleva hecho su departamento de medio ambiente, que durante este verano completó la batimetría para señalar el emplazamiento más adecuado del nuevo emisario submarino. También se revisaron 136 kilómetros de tuberías de los más de mil kilómetros que se inspeccionarán. Además se ha comprobado la estanqueidad de 4.300 pozos de las más de 15.000 arquetas de alcantarilla pendientes de estudio.
Se trata de trabajos previstos en las primeras fases del Plan de Saneamiento adjudicado por Augas de Galicia por un importe de 1,5 millones de euros y que permitirán que el próximo mes de marzo los técnicos puedan redactar el anteproyecto de construcción del nuevo emisario submarino, una de las actuaciones consideradas "prioritarias" y urgentes.
La misma consideración tiene la construcción de la depuradora de Poio, como indicó la patrona mayor de Lourizán, María del Carmen Vázquez, que recordó este martes que el objetivo de todo el sector es lograr una mejora de la calidad de las aguas que permita que muchos de estos bancos puedan abandonar su calificación como "zona C".
En este sentido, el Concello de Poio sigue sin decidir una localización para la depuradora entre las tres posibles ubicaciones en donde el proyecto es viable técnicamente.
Este punto generó controversia durante la reunión ya que el sector y la Xunta apremian al gobierno local de Poio a que resuelva y defina la ubicación de la EDAR entre tres opciones: la de Pampaído, la preferida por el Concello de Poio pero que afecta al municipio vecino de Sanxenxo; la zona de Laño a la que se oponen los vecinos de Samieira y el sector marisquero y la última alternativa de Monte Covelo, muy costosa y que implica grandes dificultades técnicas ya que supone ejecutar una depuradora por encima del trazado de la PO-308.
Beatriz Mato recordó que el gobierno gallego reservó 5,7 millones de euros para su ejecución.
Gracias a esta nueva planta se resolverá la depuración de la parte del ayuntamiento de Poio que actualmente vierte sus aguas residuales por el emisario submarino de Raxó sin depuración previa; al tiempo que podrá asumir parte de las aguas residuales que en la actualidad Poio manda a la EDAR de Placeres.
CONTINUIDAD DE ENCE
El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, al final del encuentro mantenido en la delegación de la Xunta, explicó que "estas reunións son un pequeno avance" y lamentó que el estudio de Augas de Galicia vaya "máis lento do que quixéramos todos".
Mientras la Xunta elabora el estudio, el alcalde recordó que "hai cousas que se poden ir facendo" como la actuación en la zona de Cocheras, en Mollabao. Desde la construcción de la variante de Marín, se redujo el tamaño del colector y se producen vertidos a la ría, "incluso cuando no llueve".
El alcalde de Pontevedra también puso sobre la mesa a continuidad de Ence. Fernández Lores ha insistido en su tesis de que "o saneamento completo da ría será imposible mentres Ence estea aí".
Así, Lores recordó que no se está abordando en las reuniones los 13 millones de metros cúbicos que vierte la pastera al emisario submarino "o que aumenta a imposibilidade de dilución da vertedura". Según los datos del regidor, todos los ayuntamientos de la ría vierten alrededor de 6 o 7 millones de metros cúbicos al emisario submarino, "e parecer ser que a ninguén lle interesa o tema, pero nós ímolo a poñer enriba da mesa".