La uva blanca Ratiño, nueva variedad para la DO Rias Baixas un siglo después de documentarse en Barro

Pontevedra
19 de agosto 2024

La Agencia Gallega de Calidad Alimentaria acaba de reconocer como variedad autóctona esta variedad tras un proceso de una década impulsado por la bodega Viña Moraima, tristemente famosa en las últimas semanas porque sufrió un sabotaje que dejó inservibles más de 900 cepas de viñedo, dos de esta casta

Inicio de la vinificación experimental con ratiño
Inicio de la vinificación experimental con ratiño / Viña Moraima

La Denominación de Origen Rías Baixas incorpora una nueva variedad de uva. La Axencia Galega de Calidade Alimentaria (AGACAL), de la Xunta, acaba de reconocer como variedad autóctona la uva blanca Ratiño, única en Galicia y que está documentada desde hace un siglo. 

La aprobación oficial culmina una década de investigación y procesos administrativos impulsados por la bodega de Barro Viña Moraima, tristemente famosa en las últimas semanas porque sufrió un sabotaje que dejó inservibles más de 900 cepas de viñedo en su principal parcela, de 7.000 metros cuadrados, en Barro. 

Desde Viña Moraima aplaudieron esta decisión, que "marca un hito para la viticultura gallega" y también para la cooperativa. Supone reconocer una variedad que, según un estudio publicado en el Australian Journal of Grape and Wine Research, es "única en el mundo y autóctona de Galicia". 

La resolución de la AGACAL se publicó en el Diario Oficial de Galicia el pasado 13 de agosto y supone la modificación del Pliego de Condiciones de la Denominación de Origen Rías Baixas para incluir esta variedad.

En 2021 el BOE ya había publicado la incorporación de la variedad Ratiño Gallega como variedad comercial y en 2023 el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación incluyó esta variedad entre las autorizadas para su cultivo y vinificación en Galicia. Ahora, ha llegado el paso definitivo.

Para entender este "hito" hay que remontarse a un siglo atrás, a 1929, cuando Nicolás García de los Salmones, director de la Estación Ampelográfica Central del Ministerio de Agricultura, registró la primera mención de Ratiño en Barro

Décadas después, entre 1986 y 2005, la Misión Biológica de Galicia, dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), localizó ejemplares centenarios de Ratiño en Barro, que se acreditó que tenían una antigüedad de 200 o 300 años. A partir de ahí, en 2014, se firmó un convenio para la investigación del Ratiño entre MBG-CSIC y Viña Moraima.

Viña Moraima y sus socios impulsaron la recuperación de esta casta desaparecida en la lista de variedades admitidas dentro de la D.O. con elaboraciones experimentales anuales de la uva y cosechas de aproximadamente 650 kg cada año. El resultado es un vino blanco límpido y brillante, con notas complejas y una mineralidad destacada.

En el reciente ataque de la noche del 1 al 2 de agosto, desconocidos cortaron la totalidad de las cepas de su parcela de 7.000 metros cuadrados, incluyendo dos cepas centenarias de Ratiño. Desde la bodega destacan que este acto "causa un daño irreparable a una variedad autóctona y única", destacando la importancia de esta inclusión para la preservación del patrimonio vitivinícola gallego.