El carnaval tiene cada vez mayor atracción para el público y los ayuntamientos se esmeran en organizar diversos actos y desfiles para el disfrute de los vecinos y turistas que acuden desde las diversas localidades de Pontevedra.
Según la encuesta de la Federación del Comercio de Pontevedra se observa un aumento del consumo de un 6% en estas fiestas respecto al 2016. Los sectores donde más se consume es en bazares chinos, jugueterías, grandes centros comerciales, seguidos por las mercerías, comercios de telas en general, papelerías, droguerías, entre otros.
Del gasto total estimado en disfraces por localidades, de 23 millones que se gastarán en toda la provincia, se espera que en el Concello de Pontevedra se inviertan sobre 800.000 euros y 300.000 euros los habitantes de Vilagarcía de Arousa. Es llamativo el caso en cuanto al gasto de disfraces por edades, ya que sumando las cifras de menores de 14 y de entre 15 y 24 años juntarían aproximadamente unos 6 millones, quedando por debajo del que se espera por parte de los mayores de 25 años, que es de 16 millones, con un gasto medio de 53,42 euros por persona.
En cuanto a la participación, el 60% de los encuestados tienen intención de participar en los actos que se celebran durante el Carnaval. El principal reclamo para las comparsas y los grupos que participan en los desfiles suelen ser los premios que otorgan los concellos. También es posible apreciar un incremento del número de escolares que se disfrazan este año, ya que la primera celebración la tienen en el colegio y después participan en el carnaval local o en las diversas actividades que organizan los ayuntamientos, donde hay mayor implicación.
Uno de los gastos principales, como suele ser habitual, es el consumo de la gastronomía tradicional, como orejas, filloas o lacón con grelos. El gasto medio del consumo de los productos es de 12,50 euros por persona, según la citada encuesta, en el que se incluyen también las cenas en restaurantes y el consumo en los mercados y supermercados.
Del total previsto de 35 millones de euros, casi 12 millones corresponden a la parte de alimentación, y los restantes 23 millones a disfraces y demás compras de carnaval.