Los análisis realizados en la poza del antiguo espacio minero de Ventoxo, en el municipio de Forcarei, han demostrado que el agua embalsada contiene metales que impiden su consumo y son contrarios para preservar la calidad del agua del río Lérez. La Xunta de Galicia había iniciado estudios para comprobar si el agua embalsada podría ser utilizada en el Lérez, que sufre en estos momentos un notable descenso de caudal.
Según explican desde la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, que lidera la conselleira Ethel Vázquez, el trasvase del agua retenida en el hueco minero en desuso al Lérez deterioraría considerablemente el estado natural del río debido a las concentraciones de metales pesados detectados y a la acidez del agua. En esta poza se encontraron concentraciones de níquel, selenio y cadmio, además de PH.
La propuesta tenía como objetivo reforzar el abastecimiento a los municipios de Pontevedra, Marín, Poio, Sanxenxo y Bueu, que se nutren de la cuenca del Lérez.
Por este motivo, la Xunta descarta esta opción totalmente pero maneja otras alternativas, según señala, con la intención de complementar el caudal del río en caso de que la situación actual de sequía se prolongue y empeore.
Entre esas alternativas, la Consellería cita al embalse de O Pontillón de Castro, que en este viernes ofrece un caudal medio de más de 1,5 hm 3 y permanece como reserva de agua en el caso en que el río sea insuficiente. Además, en el peor de los escenarios, ante la "hipotética imposibilidad de utilizar el agua del río Lérez, el Pontillón ofrecería agua suficiente para abastecer a la zona durante un plazo de 15 días a un mes, dependiendo del consumo.
La Xunta alerta a los Concellos como responsables de los sistemas de abastecimiento para que analicen aquellos usos del agua menos prioritarios que se puedan realizar en los municipios y que adopten las medidas que consideren necesarias para reducir la demanda.
BAJADA DEL CAUDAL DEL LÉREZ
Según la Consellería de Infraestruturas, el caudal medio del Lérez ha bajado desde los 1,7 m 3/s registrados al inicio de esta semana hasta los 1,5 m 3/s recogidos el jueves 12. Estos datos, para la Xunta, reflejan la necesidad de intensificar las medidas de contención del consumo.
La Xunta insiste en demandar medidas para reducir el consumo de agua para garantizar el abastecimiento
El gobierno autonómico indica que mantiene un contacto permanente con los concellos, incidiendo en la importancia de las medidas de concienciación a la ciudadanía y de preparación ante otros escenarios más complejos, como la alerta o la emergencia. Recuerda que la administración gallega declaró la prealerta por sequía en febrero de este 2022, momento en que era necesario adoptar ya medidas para anticiparse ante una eventualidad como la actual, indican.
La Xunta mantendrá las reuniones periódicas con los concellos de la cuenca del Lérez, para hacer un seguimiento detallado y coordinado de la situación durante las próximas semanas. Se evaluarán las medidas que se deben adoptar ante la situación actual y también en caso de que empeoren. La Consellería de Infraestruturas insiste en la necesidad de reducir el consumo de agua para garantizar el abastecimiento.