En este mes de agosto, la Policía Local de Poio está incrementando los controles que realiza para verificar que tanto ciudadanos como establecimientos de ocio cumplen con las medidas sanitarias en cuanto a los horarios y las reuniones en grupo.
Después de varias quejas por parte de vecinos y hosteleros comunicando el incumplimiento del horario de cierre de algunos establecimientos, en lo que va de mes, la Policía Local comprobó una quincena de locales, verificando cuatro incumplimientos. Eran cerca de las 2:00 de la madrugada en este pasado fin de semana del 14 y 15 de agosto cuando permanecían abiertos al público y sirviendo copas, en las zonas de Combarro y Raxó, por lo que se formularon cuatro propuestas de sanciones.
La Policía Local de Poio también controló varios arenales con botellones en la zona de Laño y la playa de Caeiro, ambas en la parroquia de Samieira y donde a menudo se juntan jóvenes para hacer botellones. En esos lugares se intervinieron varias botellas de whisky y se identificó a unas 50 personas, la mayoría de fuera de Poio.
En Combarro fueron advertidos varios restaurantes por el incumplimiento del aforo y distanciamiento de los comensales, inspeccionando además los códigos QR e información obligatoria de los aforos con carteles visibles, que tienen que estar actualizados conforme cambian las restricciones de los niveles por municipios, según la incidencia.
Desde la Policía Local de Poio destacan que son una minoría los establecimientos que incumplen las normas. Por eso, las inspecciones sirven para comprobar que todo está correcto y para facilitar información a los hosteleiros por parte de los agentes de las medidas que deben adoptar para mejorar la seguridad en el establecimiento. En muchas ocasiones son los propietarios quienes requieren la presencia policial precisamente para comprobar las instalaciones y verificar que está todo correcto.
La zona donde se detectan más infracciones por no llevar mascarilla es la del casco histórico de Combarro, donde el uso es obligatorio ya que no se garantiza la distancia de seguridad por el alto volumen de visitantes que transitas por las estrechas calles.
En Combarro existe señalización de uso obligado de mascarilla, por lo que los agentes lamentan que, a pesar de este aviso tan visible, sea en este entorno donde más infracciones se detectan.