La pasta de papel llega a las aulas

Pontevedra
15 de noviembre 2017

Son conocidos los usos industriales de la pasta de papel. Pero la celulosa puede tener otras vidas, como lo vienen demostrando en las últimas semanas los más de 400 escolares que participan en el "Taller de papel artesanal hecho a mano, con la pasta de celulosa de Ence" en el Colegio San Narciso de Marín.

"Taller de papel artesanal hecho a mano, con la pasta de celulosa de Ence"
"Taller de papel artesanal hecho a mano, con la pasta de celulosa de Ence" / Mónica Patxot

Son conocidos los usos industriales de la pasta de papel. Pero la celulosa puede tener otras vidas, como lo vienen demostrando en las últimas semanas los más de 400 escolares que participan en el "Taller de papel artesanal hecho a mano, con la pasta de celulosa de Ence" en el Colegio San Narciso de Marín.

Este taller está financiado por Ence, con una aportación de 12.500 euros de su Plan Social. Para conocer más detalles de este proyecto, hablamos con el coordinador del taller, Eulogio Rosales Galiñanes, mientras asistimos a la visita de los alumnos de 4º de la ESO del Instituto Chan do Monte de Marín:

- La idea del taller surge del ANPA del Centro San Narciso de Marín con una propuesta que yo les llevo, donde podemos aprovechar los recursos y el convenio de Ence para poder acercar a los niños a los oficios tradicionales. Y entre ellos estaría la elaboración de papel artesanal con la pasta que Ence fabrica.

¿Qué materiales de los que produce Ence utilizáis en este taller?

- Nosotros lo que hacemos es, en el proceso de elaboración del papel, dar a conocer la historia de los diferentes vegetales que pueden tener fibra para obtener papel. Ence hace pasta de papel a partir del eucalipto. Y nosotros les contamos que incluso hay otras fábricas que utilizan pasta de pino o de cáñamo. Entonces les enseñamos que cada una de estas pastas tiene unas fibras características y que, al desfibrarlas, al deshacerlas, nos encontramos que unas son fibras cortas y otras fibras largas (…) A los alumnos les damos lino, que sería una fibra larga, y eucalipto o pasta de Ence, que sería una fibra corta y haría la trama, es decir, el enlace (de las fibras de lino) y las uniones de las fibras entre ellas.

En el taller, haces un ejemplo muy curioso en el que animas a que los alumnos escuchen el sonido de un billete de 5 euros al tirar de él repetidamente por ambos lados.

La gente desconoce muchas veces que los billetes están hechos de fibras, aparte de otros controles de seguridad. Lo fundamental son las fibras. El sonido metálico de un billete está producido por el lino, que es una fibra muy fuerte y resistente, que sería la urdimbre del papel, y luego el enlace, como te dije anteriormente, sería la pasta de papel o del eucalipto, como la que hace Ence.

En este taller realizáis un uso artesano de un producto, la pasta de papel, que conocemos sobre todo por su aplicación industrial ¿Qué importancia tiene para los escolares darle nueva vida a estos materiales?

Es importante una toma de conciencia de que nosotros tenemos que reciclar todo el papel que producimos en nuestros institutos. Podemos hacer papel, con ese papel. Todo lo que tenemos en la calle, el papel o el cartón, lo podemos reutilizar. Por eso hacemos que los alumnos pasen por todo el proceso de elaboración.

También hemos comprobado in situ que los alumnos que asistían al taller exclamaban en una parte del proceso que "esto parece magia", en concreto, cuando la mezcla líquida del lino y la pasta de papel de Ence, se convertía en una hoja de papel.

Es en las llamadas pilas de formación de la hoja en donde conocen cómo se forma la hoja. Quizás es el momento más espectacular del proceso porque, en la pila donde están las fibras refinadas, ellos no las ven, porque están tan refinadas que sólo ven agua. Sólo cuando sumergen el formador de hojas y lo suben, ven el fenómeno de la colocación de las fibras largas en la posición más larga y las cortas en los enlaces. De esta manera forman la hoja. Luego la ponen en la cama o colchón (…), a continuación, cuando ya tienen hechas 15 o 20 hojas, se llevan a la prensa, se les escurre el agua y se las pondría a secar. El secado dura unas 24 horas y después pasarían por dos rodillos en donde se alisa la hoja.

En esta época tan tecnológica ¿qué aporta a los escolares poder contactar con oficios tradicionales?

Sobre todo creatividad. Además, estamos recuperando un proceso artesanal, manual, que no es caro y que actualmente tiene un valor añadido porque todos los grabados, obra gráfica o facsímil se realizan con papel hecho a mano y la demanda es bastante grande a nivel nacional. (…) Piensa que a los papeles se les pueden añadir elementos como flores, cualquier material orgánico, se les puede dar olor... Podemos hacer un papel para escribir, para imprimir, serigrafiar, hacer grabado, dibujar, poder hacer un origami, una libreta o encuadernar (…) Los niños que están en el aula con los profesores, no es solo que sepan la teoría sino que la pueden practicar, y eso es un valor añadido muy grande.

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