Ironía, diversión y, sobre todo, buen humor. Eso es lo que desplegaron por las plazas del centro histórico los once grupos que han participado este año en la XXII Mostra da Parodia del carnaval pontevedrés. Cientos de personas desafiaron al mal tiempo para contemplar las alocadas propuestas que se presentaron en esta ocasión.
El primer premio fue para todo un clásico del Entroido, la comparsa Vamos a todo. Fueron los encargados de convertir los Soportales de A Ferrería en Las ramblas de Pontevedra, un particular barrio en el que todo era posible.
Equipo Ja, que recreó un extravagante mercado municipal en la Plaza de Ourense; y Os do Val do Lérez, que desplegaron su buen humor en la Plaza de España, obtuvieron el segundo premio.
También fueron galardonados, en este caso con el tercer premio, Os de Sempre, que parodiaron la absolución de la infanta Cristina en la plaza de Curros Enríquez; la murga PTV, que llevó su familia irreal a la escalinata del Liceo Casino; y la Recriativa de Xeve, que situó su divertida propuesta entre Michelena y Gutiérrez Mellado.
Para poner fin al carnaval pontevedrés ya solo queda el entierro del loro Ravachol. Será incinerado este sábado, tras un largo velorio que se celebrará en la plaza de la Verdura, a partir de las seis de la tarde.
A las nueve saldrá el cortejo fúnebre, acompañado de su séquito y de las comparsas Amoriños de Bora, Os Canecos, Os Paparrulos, Os Solfamidas, Las Flores del Carnaval, Vamos a Todo y Os da Caña, recorriendo las calles San Román, Ferrería, paseo Antonio Odriozola, Soportales, Manuel Quiroga, Princesa, Isabel II, Real, Sarmiento y Pasantería.
Al llegar de nuevo a la plaza de A Ferrería se incinerará el loro, poniendo fin a ocho días de fiesta.