Que aquellas personas que rechazaron vacunarse contra la covid-19 corren un mayor riesgo ante esta enfermedad es un hecho. Y, para los que siguen resistiéndose, nada mejor que los datos. La mitad de los pacientes ingresados en la UCI de Pontevedra no están vacunados.
Así lo ha desvelado este martes el doctor Juan Turnes, coordinador de hospitalización covid en el área sanitaria de Pontevedra, que ha añadido además que uno de cada tres pacientes hospitalizados en Montecelo también se negaron a inmunizarse contra el coronavirus.
Se trata de un porcentaje muy elevado, ya que entre los mayores de 12 años apenas un 5% de la población del área sanitaria de Pontevedra no quiso vacunarse. Ese 5% representa por lo tanto el 50% de los pacientes críticos y el 33% de los que están hospitalizados.
Además, los hospitales de Pontevedra sufren ya el efecto de la variante ómicron, que provoca en estos momentos el 83% de las PCR positivas. Es decir, cuatro de cada cinco nuevos casos.
"Ya se ha completado la transición de la variante delta a la variante ómicron", según apunta Turnes, que reconoce la "preocupación" de las autoridades sanitarias "porque no sabemos cómo va a repercutir esto en la hospitalización".
Por ahora, el área sanitaria presenta una "estabilidad" en el número de pacientes ingresados con respecto a la semana pasada, pero hasta dentro de diez días cuando se complete el ciclo "no veremos cómo impacta esta variante en las hospitalizaciones".
Lo que sí es patente ya, según el coordinador de hospitalización covid de Pontevedra, es la "presión" que el record de nuevos contagios, ya superiores a los 400 diarios, está provocando en los servicios de urgencias y en la atención primaria.
La mayoría de los nuevos casos presentan "síntomas leves" pero, ha matizado Juan Turnes, "son muchos pacientes demandando asistencia sanitaria", por lo que las autoridades han optado por "volcar nuestros esfuerzos" en ambos servicios.