Una representación de los marineros de la flota cefalopodera gallega afectada por la falta de acuerdo con Mauritania y de la CIG-Mar mantuvieron reuniones con los portavoces de pesca de los cuatro grupos representados en el Parlamento Gallego y con el secretario general de Pesca del Gobierno en Madrid para abordar la "dramática situación" que viven tras nueve de paro obligatorio. Al mismo tiempo, denunciaron la falta de presión política del Gobierno español ante la Unión Europea y el abandono del sector por parte de la Xunta.
El secretario nacional de la CIG-Mar, Xabier Aboi, explicó que aprovecharon la junta de este martes en el Parlamento gallego para "trasladarlles o que está a suceder nestes últimos meses e reclamarlles un compromiso político que pase pola intervención do presidente da Xunta e do Goberno español no conflito". Por contra, alertan de que Bruselas "vai a seguir perdendo o tempo e mareando a cuestión co tema dos estudos biolóxicos".
Esta cuestión también fue abordada este miércoles con el secretario general de Pesca en Madrid, quien les confirmó que se produjo una reunión en Bruselas en la que se acordó la convocatoria urgente de la comisión científica y se adelantó la posibilidad de que se abra una campaña experimental para comprobar el estado real del pulpo en el caladero mauritano en la que participarían barcos gallegos.
Al mismo tiempo, le reclamaron que el Gobierno español ejerza la presión política necesaria y que negocie directamente con Mauritania, "como temos constancia que están a facer os chinos para lograr un novo acordo, extremo que nos confirmou o propio responsable político".
Asimismo, anuncian que en los próximos días mantendrán encuentros con todos los grupos políticos representados en el Parlamento Europeo "e falaremos cos eurodeputados do Partido Comunista de Portugal para que apoien co seu voto a flota galega".
Finalmente, el viernes 3 de mayo celebrarán una nueva asamblea en Marín en la que decidirán nuevas medidas de presión social que complementen el intenso trabajo institucional que están desarrollando "e que a Xunta non fai".