Los marineros de la flota cefalopodera en Mauritania y representantes de CIG-Mar trasmitieron este miércoles sus demandas y su situación actual a los portavoces de los grupos políticos representados en el Parlamento europeo. Fue durante una reunión celebrada en Las Palmas de Gran Canaria y, según ha trascendido, los afectados por el cierre del caladero se encontraron reticencias entre los eurodiputados.
Durante más de dos horas, la delegación de empresarios, marineros y sindicalistas se centraron en desmontar estas reticencias y buscar apoyos para que los eurodiputados rechacen el actual acuerdo con Mauritania y aprueben otro que permita a la flota cefalopodera española regresar al caladero mauritano. El balance final ha sido moderadamente satisfactorio
Los cefalopoderos abordaron la problemática derivada de su expulsión del caladero africano y las distintas posiciones de cara al debate del acuerdo en la comisión de Pesca, que votará la renovación del convenio con Mauritania el próximo 29 de mayo.
Representantes de CIG-Mar, encabezados por Xabier Aboi, señalaron que los grupos políticos más receptivos con su causa han sido el Partido Nacionalista Vasco y el Grupo Socialista.