Durante el año 2012 los fiscales de la Audiencia Provincial de Pontevedra tramitaron 152 procedimientos relacionados con delitos de incendios forestales. La cifra no supone una gran variación con respecto a los incoados durante el año anterior, pero todo parece indicar que experimentará un crecimiento cuando se cierren las estadísticas de este año 2013. La previsión la realizó este viernes el fiscal jefe, Juan Carlos Aladro, durante la presentación de la memoria anual de la institución al asegurar que "tengo la sensación de que en 2013 van a aumentar".
Aladro equiparó el escenario de los incendios forestales de 2013 con el que se presentó hace siete años. "Este año ocurre algo parecido a la vaga de lumes de 2006", señaló y enumeró como rasgos similares el calor, las altas temperaturas y el viento de nordés que hubo en Galicia en agosto y septiembre.
El fiscal jefe señaló que de los 152 procedimientos por incendio tramitados el año pasado, 11 acabaron calificados por delito por los fiscales pontevedreses y que durante el año se registraron 14 sentencias condenatorias contra responsables de estos delitos contra el medio ambiente. Este escaso porcentaje de delitos que acabaron en condena frente a los que se investigaron se debe, seún Aladro, que son una modalidad delictiva de "especial dificultad de investigación" y que resultan muy difíciles de demostrar.
"Desde el punto de vista de la investigación del delito es la más compleja que yo he visto", señaló e hizo referencia a que son una modalidad delictiva que tiene "demasiado espectro en sus autores". Así, la mayoría de los delitos por incendios forestales tienen un carácter imprudente por quemas incontroladas que se hacen sin permiso o en días no adecuados y entre los delitos dolosos hay desde aquellos que buscan ampliar los pastos a los que se mueven por venganza y las personas con discapacidad intelectual o algún tipo de enfermedad pirómana.
Aladro y Carmen Novo reactivarán la investigación judicial de la desaparición de Sonia Iglesias
El fiscal jefe indicó que los dos delitos que más volumen de actividad generaron durante el año 2012 fueron los de violencia de género y doméstica y los de tráfico. En materia de violencia de género en el último año se produjo un pequeño descenso de los asuntos que llegan a la Fiscalía. Aladro no encuentra una "razón lógica", pero interpreta que "quizás se podría valorar en que la ley está más asentada".
En relación con la violencia de género, hizo referencia al caso abierto para aclarar la desaparición de Sonia Iglesias en agosto de 2010, que acaba de regresar al juzgado específico de violencia sobre la mujer. Al respecto, anunció que tanto él como la teniente fiscal, Carmen Novo, tratarán de reactivar la investigación ahora que se ha aclarado la competencia judicial del caso y que "vamos a tratar de reiniciar algunas gestiones".
La memoria de la Fiscalía 2012 recoge que "no se advierte un excesivo crecimiento de los ilícitos en esta provincia". Las estadísticas recogen una disminución de los delitos contra la vida (con un 34% menos casos), las lesiones (28,38%), los delitos contra la libertad (24,24%), los robos con fuerza (11,60%), los daños (50%), los delitos contra la propiedad intelectual e industrial (4,8%), los delitos contra la administración de justicia (12,09%), el blanqueo (17,24%) y la violencia doméstica (16,37%).
La actividad de la Fiscalía se vio incrementada en el resto de modalidades delictivas. El principal crecimiento lo registraron los delitos de robo con violencia o intimidación, con un 31,89% más de asuntos. También aumentaron los delitos contra la libertad sexual (19,35%), los delitos contra las relaciones familiares (9.60%), los hurtos (1,21%), los robos en casa habitada aumentan un (21,31%), los robos y hurtos de uso (41,17%), las estafas (14,54%), el tráfico de drogas (22%), los delitos contra la administración pública (7,95%) y la receptación (17,24%).