El día grande de la Feira Franca comenzó este sábado de manera formal a las 11.30 horas con la apertura del mercado medieval en la avenida de Santa María y la muestra de oficios tradicionales en las plazas de A Pedreira, A Ferraría e O Peirao, dos de las citas fundamentales que contribuyen a que el ambiente que se respira en Pontevedra durante este fin de semana sea el del siglo XV.
Canteros, herreros, palilleras, cesteros, olleros, rederas y carpinteros muestran por las plazas de la ciudad cómo trabajaban seis siglos atrás y, con músicos, juglares, campesinos, toneleros, artistas, comerciantes, damas y caballeros, trasladan a la población a aquel 1467 en el que el rey Henrique IV concedió a la ciudad el privilegio de un mercado libre de impuestos de un mes de duración.