Con un total de 467 votos a favor, 154 en contra y 28 abstenciones los eurodiputados han aprobado el pleno del Parlamento Europeo de este martes el acuerdo de pesca entre la Unión Europea y Mauritania que expulsa fuera del caladero a la flota cefalopodera de O Morrazo.
Finalmente no han llevado a buen puerto las gestiones emprendidas por la Xunta de Galicia para tratar de bloquear su ratificación y los europarlamentarios valoraron las mejoras técnicas obtenidas por la comisaria de Pesca, Maria Damanaki, durante la renegociación del convenio.
Este convenio es el más importante en volumen y variedad de especies de los que la Unión Europea ha negociado con terceros países y ofrece licencias para 12 Estados miembros a cambio de 70 millones cada uno de los dos años que estaría en vigor.
Este acuerdo confirma la expulsión de la flota cefalopodera gallega, en su mayoría barcos de Marín, del caladero de Mauritania al menos hasta finales de 2014, fecha hasta la que estará vigente este nuevo protocolo. Se trata de un nuevo golpe para unos marineros que han criticado duramente el resultado de esta votación en la que, según el secretario de CIG-Mar, Xabier Aboi, "moitos deputados do PP e do PSOE non votaron pola flota galega".
"ÿ o que hai, o papel que nos dá Europa aos galegos: de desguace, de eliminar o sector e deixarnos como man de obra", afirmó Xabier Aboi. Y es que tras este resultado lamenta que una buena parte de los barcos serán desguazados, mientras que el resto podrían tener ciertas alternativas en países como Senegal, Guinea-Bissau o Marruecos, propuestas que el sector no termina de ver viables.
En todo caso, desde el sindicato CIG anuncian que tratarán de obtener "máis datos" sobre lo que votó cada eurodiputado y critican que algún grupo "pediu que non constase". Y sobre la labor de la Xunta y de la conselleira do Mar, Rosa Quintana, criticó que "apareceu a última hora, tarde, mal e arrastro", al asegurar que debería haberse interesado por este conflicto desde el primer día. "Pero al menos fíxoo. Outros nos venderon vilmente", concluiu Aboi.