La Deputación de Pontevedra ha asegurado estar dispuesta a apoyar a la Xunta de Galicia en la creación de un centro de investigación en el Pazo de Lourizán pero dejando claro que no permitirá que este histórico inmueble de su propiedad sea cedido a la empresa Ence.
Durante una hora y media se han reunido este lunes en la sede provincial el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda; la conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato; y el delegado de la Xunta en Pontevedra, Xosé Manuel Cortés Tourís, con la presidenta de la Deputación, Carmela Silva; el vicepresidente provincial, César Mosquera y el diputado Carlos López Font.
Coincidiendo con este encuentro, a las puertas de la Deputación, se concentraron un centenar de personas pertenecientes a colectivos como la Asociación pola Defensa da Ría, Marea Pontevedra, Vaipolorío, Pedaladas, así como trabajadores de la Xunta en Lourizán, para manifestar su rechazo a que Ence se haga con la emblemática residencia de verano de Montero Ríos.
Fue un encuentro "normal e mesmo cordial", según coincidieron en valorar Carmela Silva y Alfonso Rueda, "demostrando que as administracións podemos falar con normalidade transcendendo as persoas e os personalismos", destacó el vicepresidente de la Xunta.
Después de varias semanas de declaraciones cruzadas en los medios de comunicación Silva y Rueda agradecieron el "bo ton institucional" y, en el caso del vicepresidente, también se felicitó porque "se falou con claridade, o cal eu creo que é bo".
Los miembros del ejecutivo gallego acudieron al Pazo provincial "para transmitir unha formulación que se nos facía a nós", es decir como explicó el propio Rueda, para trasladar la propuesta de la empresa Ence de restaurar el Pazo de Lourizán, que gestiona la Xunta. "Un proxecto moi bonito", dijo Rueda.
"Unha proposta que nós fixemos inicialmente", tras la firma del pacto ambiental en junio del año pasado entre Xunta y la compañía pastera, dentro del cual Ence acordó hacer una inversión de 10 millones de euros, cinco en la rehabilitación del pazo y cinco en proyectos de investigación, "para converter a Pontevedra nun centro de referencia a nivel nacional no I+D+i no ámbito forestal".
La "sorpresa" para la delegación de la Xunta fue que "ao final si que había impedimentos" para poder sacar adelante la propuesta de la multinacional.
Rueda precisó respecto a esos "impedimentos" que la Deputación "non estaría disposta a dar algún tipo de autorización" o que "non hai garantía" de que el gobierno provincial vaya a permitir que Ence haga en Lourizán su centro de I+D, por lo que el vicepresidente concluyó que "a día de hoxe e salvo que houbese un cambio de postura, parece difícil que se poida autorizar esta actuación que se quería facer dentro do Pazo de Lourizán".
Por su parte, Carmela Silva insistió en que el centro de investigación que se les presentó este lunes "non ten nada que ver coa Xunta".
"A nosa posición de colaboración coa Xunta no que se refire a todos os proxectos de investigación, absolutamente toda, pero deixando claro desde o primeiro momento que a Deputación non vai avaliar ningún proxecto de Ence", sentenció Carmela Silva.
La finca y el Pazo de Lourizán lleva cedida desde 1943, primero al Estado y desde 1991 a la Xunta en un convenio que se renovó por última vez en el año 2000. El convenio es prorrogable de forma automática por diez años si ninguna de las dos administraciones lo denuncia con un año de antelación. "Nós non temos previsto denunciar este convenio", precisó la presidenta.
Carmela Silva recordó que en este convenio figura entre las obligaciones de la Conselleria de Medio Ambiente "desarrollar en la finca un proyecto ambiental que incluya la investigación de la gestión sostenible del monte" y también "efectuar obras de conservación necesarias en la zona noble".
"Estamos encantados en colaborar ao cento por cento coa Xunta de Galicia para desenvolver ese proxecto ambiental que di o convenio, pero coa Xunta non con Ence, que é a proposta que se nos trouxo", afirmó la presidenta provincial.
César Mosquera señaló que la propuesta presentada este lunes "é unha especie de patrocinio, a cambio de deixarlle poñer a publicidade na camiseta", cuestionando el interés de Ence en un centro de investigación. El vicepresidente provincial cree que realmente la propuesta pretende "dunha maneira indirecta que a Deputación avale ese pacto ambiental que nós estimamos que son a migallas a cambio de regalarlle o gordo que é a concesión para que se nos quede Ence aquí por 60 anos. Iso non o imos a deixar pasar".
Por lo tanto "a Deputación colaboraría coa Xunta de Galicia para que se poida desenvolver este proxecto pero, en ningún caso, a Deputación está disposta a colaborar con Ence".
Alfonso Rueda repitió durante su comparecencia de prensa que "eu non abandono completamente as esperanzas" aunque admite que la situación es "difícil" pero expresó su convicción de que este "bo ton institucional estou seguro que será o preámbulo da reunión que vai manter o presidenta da Deputación co presidente da Xunta" que tendrá lugar el próximo día 27 de febrero en Santiago y "alí falarase de todo o que teña que ver nas relacións da Xunta e a Deputación".
"Para a reunión se poden variar as cousas, eu espero que si. Alegrariámonos moitísimo", añadió Rueda.
PENDENTES DE LA ENTREVISTA CON FEIJÓO
En la agenda de la reunión con Núñez Feijóo, la presidenta de la Deputación informó que se incluirá las transferencias de centros que están en manos de la administración provincial pero que son competencia exclusiva de la Xunta como el centro Príncipe Felipe, la finca de Mouriscade, la Estación fitopatológica do Areeiro, o la escuela de Enfermería "e tamén podemos falar doutras transferencias", admitió Carmela Silva.
Aunque no se apuntó durante la comparecencia de prensa, también cabe la posibilidad de que la Xunta solicite la transferencia del propio Pazo de Lourizán, lo que daría una nueva vuelta a esta situación.