La presidenta de la Deputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha anunciado que el organismo provincial agilizará "aún más" el pago a empresas y proveedores para inyectar liquidez en la economía y garantizar la "supervivencia" del tejido empresarial.
Todos los servicios administrativos han recibido la instrucción de apurar "al máximo" la tramitación de estos pagos, para avanzar "hasta el límite de lo que permita la normativa" para ayudar a empresas y autónomos.
Silva advierte que la crisis sanitaria del coronavirus está transmitiéndose a una "velocidad inusitada" a la economía de la provincia, lo que afectará al bienestar de los ciudadanos.
Esta será, según la dirigente provincial, una "prioridad absoluta" para su gobierno que ya era, según los datos del Ministerio de Hacienda, una de las administraciones que antes realiza sus pagos, con un periodo medio de once días.
"Estamos hablando de un asunto muy sensible", ha defendido Carmela Silva, que asegura que hay procedimientos "que pueden esperar", pero este no es uno de ellos.
Además, la presidenta provincial ha confirmado que activará un fondo de liquidez, dotado con 21 millones de euros, para anticipar a los ayuntamientos de Pontevedra que tengan delegadas sus competencias recaudatorias en el ORAL de la Deputación.
Este dinero saldrá de la cuantía recaudada por el pago de tasas de 2019, unos 18 millones de euros, más un incremento de 3 millones de anticipo de la recaudación del impuesto de vehículos, que no podrá ser cobrado en plazo debido al estado de alarma.