Amanda Durán Fontenla, una vecina de 101 años presidió este fin de semana a vigésimo segunda Reunión de la Tercera Edad organizada por el Concello de Campo Lameiro en el pabellón municipal de deportes con el fin de que los mayores de 60 años puderan protagonizar un almuerzo de confraternidad, el primero de estas características que se celebra en el municipio después de las restricciones impuestas por la pandemia de la covid-19.
Como acto previo, los participantes asistieron a una misa cantada oficiada por el cura párroco Fermín Santiago Iglesias, y que estuvo amenizada por la Coral Polifónica de Campo Lameiro.
A continuación, tuvo lugar el almuerzo de confraternidad en el que pudieron participar personas mayores de 60 año y pensionistas de invalidez empadronados en el Concello con un precio especial por persona de 10 euros. En el caso de no estar empadronados, el precio del plato fue de 32 euros por asistente.
El almuerzo fue servido por el equipo de catering de Pulpería A Fuchela y el baile de postre corrió a cargo del dúo Caché que animó a tarde de lluvia con música y piezas habituales de los repertorios verbeneiros que suelen bailar el asistentes.
Antes de procederse al baile, el alcalde, Carlos Costa, agradeció la presencia a los asistentes y aprovechó para hacer entrega de unos regalos conmemorativos a varios vecinos presentes, entre ellos a la centenaria Amanda Durán Fontenla.
La otra centenaria residente en el municipio, María Fontenla Silva, de Paredes y que cumplió 101 años el 4 de noviembre, también fue objeto de un homenaje en su domicilio, la donde se trasladó el alcalde Carlos Costa para hacerle entrega de una placa, un ramo y un retrato en un cuadro.
También como novedad en esta ocasión, los asistentes pudieron llevarse gratuitamente una fotografía conmemorativa de su paso por este evento realizado por la “cámara mágica”, un novidoso Fotomatón instalado por el Concello en la entrada del pabellón con un decorado en la parte posterior para poder posar los asistentes la esta XXII Reunión de la 3ª Edad y llevarse, ya en el momento, una instantánea de recuerdo de su participación en esta actividad.
Finalmente, se sortearon entre los asistentes un total de 4 valles de 25 euros cada uno para poder ser canxeados en los establecimientos colaboradores del comercio local de Campo Lameiro por calqueira producto o servicio.