Internan en un centro de menores al joven que agredió a Rajoy

Pontevedra
17 de diciembre 2015
Actualizada: 22:29

El juzgado acordó el internamiento en régimen cerrado, la medida más dura que podía haber adoptado ante el hecho del que se le acusa. El menor será internado en el centro que la Xunta determine por un periodo máximo de seis meses, sin perjuicio de que por parte del Juzgado de Menores de Pontevedra se pueda dejar sin efecto antes la medida o acordar la prórroga

Los fiscales explican el internamiento del detenido por agredir a Rajoy Mónica Patxot

El joven detenido este miércoles por agredir a Mariano Rajoy durante su paseo electoral por Pontevedrapasará la noche en un centro de menores imputado por un delito de atentado a la autoridad, pero agravado por la persona víctima de sus acciones, un presidente del Gobierno. Es una decisión adoptada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Pontevedra a última hora de este jueves, once horas después de que el chico llegase a los juzgados de A Parda. 

Según ha informado el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) y confirmado el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, el juzgado acordó el internamiento en régimen cerrado, la medida más dura que podía haber adoptado ante el hecho del que se le acusa.

El menor será internado en el centro que la Xunta determine por un periodo máximo de seis meses, sin perjuicio de que por parte del Juzgado de Menores de Pontevedra se pueda dejar sin efecto antes la medida o acordar la prórroga de la misma. Ese centro será necesariamente el de Monteledo, en Ourense, el único de régimen cerrado que existe en Galicia. 

El menor permaneció en los juzgados desde las 10.00 horas de este jueves hasta alrededor de las 21.00 horas. Había llegado en un vehículo policial procedente de la Comisaría de Marín, donde pasó la noche. Por la mañana fue sometido a un informe forense en el Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), cuyo resultado fue entregado a la Fiscalía de Menores ya a primera hora de la tarde, pero su contenido no se ha difundido. Salió poco después de conocerse su internamiento también en un coche policial y sin que pudiese vérsele la cara, pues su imagen e identidad debe preservarse en atención a su condición de menor.

Además, el joven se entrevistó con psicólogos y asistentes sociales antes de pasar, a primera hora de la tarde, a disposición de la fiscal de Menores de Pontevedra, Encarnación Boullón. La declaración no fue demasiado larga y el chico sí respondió a las preguntas de la fiscal. Sobre las 18.00 horas terminó la declaración, pero la decisión sobre su situación procesal se retrasó más de dos horas mientras Fiscalía decidía qué medida cautelar solicitaba y el juez de guardia la decretaba. 

A las 21.00 horas Boullón y Aladro salían para comunicar a la prensa, que estuvo durante todo el día en los juzgados para conocer la resolución, que habían pedido el internamiento en un centro cerrado y la jueza lo había autorizado. Pidieron esta medida, la más dura, en atención a la gravedad de los hechos, pues creen que es autor de un delito de atentado a la autoridad con las circunstancias agravantes recogidas en los artículos 550.1 y 550.3 del Código Penal, que se aplican a quien agrade o, con intimidación grave o violencia, opone resistencia grave a la autoridad, a sus agentes o funcionarios públicos, o lo hagan cuando se hallen en el ejercicio de las funciones de sus cargos o con ocasión de ellas; así como cuando se agrede a un miembro del Gobierno. Podrán caerle hasta seis años de internamiento cuando sea juzgado.

A lo largo del día la fiscal también se entrevistó con los padres del menor, que le acompañaron en su estancia de casi once horas en los juzgados.