La única "opción real" para evitar que Ence se marche de Galicia, según coinciden la Xunta y los trabajadores, es que la fábrica pastera siga en Lourizán. De ahí que ambas partes hayan instado al Gobierno a buscar una "solución jurídica" para mantener su actual emplazamiento.
Ha sido durante la reunión que ha mantenido este jueves el vicepresidente segundo de la Xunta y conselleiro de Economía, Empresa e Innovación, Francisco Conde, con los representantes sindicales de los trabajadores.
Conde ha transmitido al comité de empresa la "máxima colaboración" del gobierno gallego en la búsqueda de una solución que garantice la continuidad del proyecto industrial de Ence en Pontevedra, postura que mantendrá en la mesa de trabajo convocada el 10 de septiembre.
La Xunta, según el titular de Economía, será "absolutamente proactiva" y promete trabajar con el Gobierno y la propia empresa para lograr ese objetivo.
En la situación de la fábrica de Ence, ha añadido el vicepresidente gallego, "está la prueba de que la transición energética que defiende el Goberno sólo se puede contabilizar en cierre de empresas y más impuestos para las familias y para la propia industria"
La presidenta del comité de empresa de las oficinas de Ence en Pontevedra, Ana Cedeira, ha explicado que el "único objetivo" con el que los trabajadores iban a este encuentro es para pedirle a la Xunta que exigiera una "mayor implicación" del Gobierno en este asunto.
"No entramos en el detalle de cuál puede ser la solución. Que el ministerio organice la mesa y veremos qué variables puede haber", ha defendido Cedeira, a quien le preocupa que debido a la sentencia de la Audiencia Nacional pueda hacer un "cese inmediato" en la actividad de Ence.
Esta opción, que podría precipitarse si el Supremo inadmite el recurso presentado por la empresa, "nos preocupa muchísimo", según la representante de los trabajadores, que celebra que la Xunta sea "consciente" y se haya mostrado "sensible" a esta problemática.
A este respecto, el secretario del comité de empresa de la fábrica, Pablo Bacariza, coincide que ese compromiso de trabajar para que no haya un cese de actividad sin resolver antes el futuro de los trabajadores, ha sido lo más positivo de este encuentro con el vicepresidente.
"A Xunta dixo que era una opción primordial e é o que pretenden buscar na próxima reunión da mesa de traballo", ha apuntado Bacariza, para quien el gobierno gallego debe ser "máis activo" en este foro de diálogo "e non un mero espectador".
El portavoz de los trabajadores de la fábrica asegura que una opción que se planteó para garantizar la continuidad de Ence en Pontevedra sería estudiar una posible modificación de la Ley de Costas, pero reconoce que ante la sentencia "non sei como pretenden cambiala".
Sea como sea, desde la Xunta "cargan toda responsabilidade no Goberno central", según Bacariza, "como se eles non tiveran competencias en industria", aunque por el momento "remiten todo" a la mesa de trabajo que Transición Ecológica presidirá el 10 de septiembre.