En una salida de "ciencia popular", organizada el pasado 29 de octubre por el Centro Social A Pedreira, un grupo de personas han recorrido la integridad del curso del riachuelo Valdecorvos que está al descubierto, desde el antiguo lavadero de A Seca, entre las calles Fernando Olmedo y Casimiro Gómez, hasta el humedal próximo al CEIP Vilaverde-Mourente.
En ese tramo de algo más de un kilómetro han podido comprobar, junto a los miembros de la Asociación vecinal de Altamira-San Antoniño, que la calidad del agua y el estado del entorno fluvial se han deteriorado desde que hicieran la última inspección.
Según han señalado, la zona Este de la ciudad está creciendo y sufriendo cambios importantes que provocan un deterioro en el estado en el que se encuentra el riachuelo Valdecorvos.
Así, han destacado los vertidos de los aliviaderos de saneamiento localizados en la Avenida de Lugo, los arrastres de tierra existentes en las proximidades del polígono así como las aguas fecales detectadas en las inmediaciones del CEIP Vilaverde.
Desde A Pedreira aseguran que "la construcción de nuevos proyectos urbanísticos, tanto públicos como privados, a escasos metros de las márgenes del canal fluvial están constriñendo el medio acuático con la desaparición del hábitat ripícola, el bosque de ribera y toda su fauna asociada".
Advierten además, que esto "contribuirá a la pérdida de capacidad de amortiguar los efectos de las futuras crecidas".
En esta salida de "ciencia popular" se ha constatado que "la proliferación de plantas alóctonas o invasoras es también un urgente tema a tratar en este río" pues en su recorrido han detectado "más de una docena de especies diferentes, muchas de ellas asociadas a ecosistemas que sofrieron perturbaciones, naturales o antrópicas, o que se benefician de ellas para su dispersión o implantación".
Constataron también un significativo aumento del tráfico de vehículos en la zona, movimientos de tierra, cimentaciones y otras obras que aumentaron la cantidad de contaminación, basura, tuberías y vertidos que llegan directamente al curso fluvial, contribuyendo a la subida de la temperatura del agua, de su acidez (pH), turbidez, nitratos disueltos en ella y también disminuyendo el contenido de oxigeno disponible para los pocos macro invertebrados que así encontraron.
Como prueba han hecho analíticas y muestreos en colaboración con la Asociación ecologista ADEGA.
Por todos estos motivos tan desfavorables desde el Centro Social A Pedreira hacen un "fuerte llamamiento" al vecindario y a todas las personas que todavía no conozcan este espacio "para acercarse a disfrutar de él y poder comprobar por si mismos su actual estado y pensar en su porvenir. Para que el riachuelo Valdecorvos vuelva a dar de beber a quien pasa".