La Guardia Civil ha incautado en Bueu un lote de 56 kilos de pulpo que fueron hallados en una furgoneta. El conductor, que aseguró ser el propietario de la mercancía, no pudo explicar el origen del pulpo ni presentar la documentación que acredita su legalidad.
Según ha explicado el instituto armado, el pulpo fue interceptado en una inspección rutinaria que se desarrolló en el puerto de Bueu sobre captura, comercialización y transporte de productos pesqueros.
Al iniciar la inspección, los agentes se percataron de la salida precipitada de una furgoneta que abandonaba el muelle con una velocidad inadecuada, posiblemente al observar la llegada del vehículo oficial.
Ante la actitud sospechosa de este vehículo, fue seguido y posteriormente interceptado en una calle del casco urbano de la localidad.
Al inspeccionar la mercancía que transportaba la furgoneta, la Guardia Civil encontró dos capachos ocultos entre los asientos traseros, que contenían los 56 kilos de pulpo sin la preceptiva documentación.
Los agentes identificaron al conductor y comprobaron que se trata de una persona reincidente en este tipo de infracciones.
Junto con la incautación del pulpo, se le denunció como supuesto autor de una infracción administrativa a la vigente Ley de Pesca de Galicia, por transportar productos procedentes de la pesca extractiva sin el correspondiente documento de transporte.
El pulpo se entregó en el comedor social de Cangas y la denuncia se remitió al órgano competente de la Consellería do Mar.