La asociación Amencer-ASPACE presentaba este viernes en su sede de Pontevedra, en Ponte Muíños, una revolucionaria tecnología que permitirá caminar a niños con parálisis cerebral y patologías afines.
Se trata del Atlas 2030, el primer exoesqueleto pediátrico del mundo, un dispositivo robótico que se adapta al cuerpo del niño imitando el funcionamiento del músculo natural.
Durante la presentación, Hugo, un niño de 7 años con parálisis cerebral, demostró el funcionamiento de este innovador dispositivo ante un autoridades, personal sanitario y familias.
Entre los asistentes se encontraba su madre, Bea, quien expresó quedarse sin palabras al ver a su hijo de pie y caminando a lo largo de diez metros con la ayuda de esta armazón mecanizada.
"É emocionante. Isto significa moita esperanza. O movemento é vida", afirmaba la madre de Hugo.
TECNOLOGÍA REVOLUCIONARIA
El Atlas 2030, desarrollado por la empresa española Marsi Bionics, cuenta con ocho articulaciones activas que permiten al usuario caminar tanto hacia adelante como hacia atrás.
"Además del apoyo para caminar, permite la exploración completa del espacio, lo que ofrece a los niños grandes oportunidades de participación e inclusión", explicó Víctor Chacón, responsable de comunicación de Marsi Bionics
Pablo García, responsable del servicio de rehabilitación externa de la asociación, destacó que cada sesión es individualizada y se basa en las características específicas de cada usuario.
Es ajustable a las medidas de cada niño y se pueden marcar los parámetros según las características y limitaciones de cada paciente con una opción de funcionamiento automático generando un patrón de marcha específico y una función personalizada, que posibilite el entrenamiento de ia fuerza muscular del niño.
Las sesiones duran entre 30 y 45 minutos, dependiendo de la tolerancia del paciente y siempre se busca un sentido lúdico.
De esta forma, durante el recorrido de prueba con Hugo, se le invitaba a seguir la música de Bartolito; a pisar las manos de los fisioterapeutas; o a caminar hacia atrás imitando el "moonwalk" de Michael Jackson.
"Todo es jugar", asegura Pablo García, que busca a través de un sistema lúdico y motivador que mejore la calidad de vida y la autoestima de estos niños.
Hasta el momento se ha probado con siete menores desde que el exoesqueleto llegó en septiembre a Amencer-ASPACE, primer centro en la provincia que dispone de este dispositivo tecnológico.
La fisioterapeuta María Bernárdez calificó el dispositivo como "unha revolución total" en su trabajo diario, ya que permite una mayor libertad de interacción con el paciente, potenciando su autonomía y mejorando sustancialmente su movilidad.
"Facilita moito o que podamos exercitar a marcha cun neno e facelo ademais con parámetros obxectivos", explicaba emocionada por los avances que supone esta herramienta.
"É un soño feito realidade", asegura Bernárdez, quien recuerda cuando en los inicios de la asociación solo tenían un espejo para intentar trabajar los movimientos de los usuarios.
DONACIÓN ANÓNIMA
El servicio comenzará a funcionar en noviembre con un precio máximo de 45 euros por sesión, buscando hacerlo accesible al mayor número posible de usuarios.
La incorporación de esta tecnología, valorada en 265.000 euros, entre el sistema, seguros y curso para los monitores, ha sido posible gracias a una donación anónima.
Aunque actualmente el Atlas 2030 está limitado a uso clínico bajo supervisión profesional, Marsi Bionics ya trabaja en el desarrollo de versiones futuras que podrían utilizarse en los hogares de los pacientes.
Al acto acuían Agustín Reguera, delegado territorial de la Xunta de Galicia en Pontevedra; Natalia Botana, directora territorial de Sanidade; José Ignacio Martínez, jefe del servicio de dependencia de la delegación de la Xunta en Vigo; Rafael Domínguez, vicepresidente primero de la Deputación de Pontevedra; Eva Vilaverde, teniente alcalde de Pontevedra; y el concejal Xaquín Moreda.