Hosteleros de Poio, Marín y Pontevedra peregrinan a Santiago para reclamar a la Xunta el rescate del sector

Pontevedra
28 de enero 2021

Los once hosteleros que caminaron a Madrid para exigir ayudas a todos los grupos políticos del Parlamento, se desplazan ahora a Santiago para participar este viernes en una manifestación en la que participarán hosteleros de toda Galicia

Salida de hosteleros de Poio, Marín y Pontevedra en su peregrinación a Santiago
Salida de hosteleros de Poio, Marín y Pontevedra en su peregrinación a Santiago / Hoempo

Los once hosteleros que caminaron de Pontevedra a Madrid para reclamar ayudas para el sector, vuelven este jueves a la carga con una peregrinación a Santiago de Compostela, donde este viernes está prevista una concentración de todos los hosteleros de Galicia para conseguir de una vez por todas un rescate para la hostelería. 

El objetivo de esta nueva ruta es hacer ver tanto al gobierno autonómico como al resto de partidos de la oposición la necesidad de sentarse a dialogar con el sector para la aprobación de ayudas directas de carácter urgente. Desde Hoempo, colectivo al que pertenecen los peregrinos, reclaman ayudas reales, sin letra pequeña. Quieren la supresión de impuestos mientras sus negocios permanezcan cerrados, la exención de la Seguridad Social, un erte único para sus empleados y que se deje de señalar al sector como culpable de la pandemia.

Estos once pequeños empresarios de Marín, Poio y Pontevedra partieron a primera hora de este jueves desde la delegación de la Xunta en Pontevedra hacia Santiago. Tienen previsto llegar a Milladoiro a última hora de la tarde. Pasarán la noche en esta localidad, para unirse el viernes a la marcha convocada por todo el sector gallego. 

A las 9.30 horas de este viernes está prevista la salida de la marcha, en la que participarán centenares de hosteleros, con destino a la sede de la Xunta.

A pesar del malestar generalizado por las medidas impuestas a la hostelería, desde Hoempo quieren remarcar que sus asociados "en ningún momento se han negado a cerrar sus negocios y aceptan bajar la verja de sus locales siempre que los informes sanitarios y el comité de expertos así lo considere. Pero lo que no aceptan es que no se les indemnice y que, aun por encima, tengan que seguir haciéndose cargo de todos sus gastos e impuestos".