El espacio gastronómico de la primera planta del mercado, cuya actividad habitual se ha visto interrumpida por las restricciones impuestas por el actual estado de alarma, está preparando ya su vuelta a la normalidad para cuando las autoridades así lo permitan.
Para ello, el Concello ha aprobado invertir 315.000 euros, durante los dos próximos años, para poner en marcha una serie de actividades de dinamización que serán financiadas con fondos europeos, al igual que la rehabilitación y acondicionamiento de las propias instalaciones.
De esta cantidad, según ha explicado la portavoz del gobierno municipal, Carme da Silva, 204.000 euros serán para un programa de actividades para niños y para incentivar el consumo de los productos propios de todo el mercado.
El resto, unos 111.000 euros, será para impulsar una campaña de promoción.
Esta inversión, según ha matizado Da Silva, se realizará a lo largo de los dos próximos años.
La responsable de Promoción económica, Yoya Blanco, ha explicado que el servicio está "a la espera" para comprobar cómo evoluciona la situación de alerta sanitaria, porque "no sabemos" qué restricciones se aplicarán a la hostelería durante la desescalada.
"El espacio es el que es y si obligan a mantener la distancia social habrá que quitar mesas y tomar otras medidas", señala la edil socialista, que se resigna a tener que "actualizar y recomponer" el gastromercado, al menos a corto plazo.
Esta situación, además, ha provocado que las ideas que manejaba el Concello para completar los puestos y bancadas libres, tanto en la venta de producto fresco como en el espacio gastronómico, hayan quedado "en el aire", según Blanco.
"Si nos van a limitar el espacio y se va a restringir el aforo no tiene sentido que lo llenemos", ha añadido. Esto todo caso, ha garantizado que los técnicos de Promoción económica siguen trabajando "a todo trapo" para buscar la mejor solución para todos.
APLICACIÓN TRIBUTARIA
En otro orden de asuntos, la Xunta de Goberno ha aprobado la contratación de la empresa GTT para la creación e instalación de una aplicación electrónica para la gestión tributaria municipal que permita conocer, sin margen de error, la situación fiscal de todos los ciudadanos.
La compañía, que fue la única que se presentó a esta licitación, recibirá 359.370 euros. Tendrá cuatro meses para crear esta herramienta y comprobar que encaja con la plataforma Cividas, que gestiona la administración electrónica, y otros dos meses para su integración.
Además, el Concello ha prorrogado por nueve meses el contrato de limpieza de las dependencias municipales, ante los problemas de la nueva licitación; y del contrato con Recygest para la gestión recaudatoria extraordinaria, que se amplía un año más.
Por otra parte, el gobierno municipal licitará por 209.000 euros en tres años el contrato de seguridad privada para la Unidad de Conductas Adictivas, la Casa da Luz y el espacio gastronómico del mercado; y aportará 37.790 euros para completar el dinero que pone la Xunta -algo más de 155.000 euros- para ampliar la cobertura del servicio de ayuda en el hogar durante dos meses.