Con el fin del estado de alarma, previsto para el próximo 9 de mayo, cambiará radicalmente la gestión de la pandemia. Son varias las comunidades, entre ellas Galicia, las que han advertido que se quedarán sin "instrumentos adecuados" para regular las restricciones necesarias.
Preocupa especialmente el hecho de que, actualmente, seis comunidades están todavía en riesgo extremo por la incidencia de la covid-19 en sus territorios y el virus "se puede dispersar", según ha apuntado el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo.
Galicia no es una de ellas. La situación de la pandemia en Galicia está "controlada", según Núñez Feijóo, que ha destacado la "tendencia a la baja" en el número de contagios, la "estabilización" en los ingresos y una incidencia a 14 días por debajo de 100.
Estos parámetros, ha señalado este lunes en Pontevedra, "nos dan optimismo" para esta "nueva etapa" que se abrirá tras el estado de alarma y para la que las autoridades sanitarias gallegas han comenzado a prepararse.
El comité clínico que asegura a la Xunta se reunirá el próximo jueves, tras la reunión del Consejo Interterritorial de Salud prevista para el día anterior, para adoptar las "medidas concretas" que entrarán en vigor en toda la comunidad "este mismo fin de semana".
El presidente gallego entiende que la evolución epidemiológica de la comunidad permite "ampliar horarios e ir dejando sin efecto el toque de queda", pero ha reiterado que "lo veremos el jueves" tras la reunión del comité clínico.
Este organismo, ha destacado Núñez Feijóo, "siempre adoptó decisiones con criterios epidemiológicos y lo hizo de manera clara", algo que contribuyó a que todas sus medidas fueran avaladas por los tribunales gallegos con sentencias "que siempre fueron positivas".
En todo caso, el dirigente autonómico ha reiterado que "es el momento de mantener la prudencia y poder ganar tiempo" para adelantar la vacunación e inmunizar a la población, unos 245.000 gallegos esta semana.
Hasta 90.000 de estos gallegos serán hombres y mujeres de 66 a 69 años que serán llamados a partir del viernes para recibir la primera dosis de la vacuna, aunque a nivel poblacional también se avanzará entre 60 y 65 años y en los mayores de 70, que recibirán la segunda dosis.
Con respecto a las nuevas variantes, Feijóo ha apuntado que en Galicia "tenemos todas las cepas", algo que ha achacado a que esta comunidad es "lugar de paso", tiene frontera con otro país -Portugal- y a lo largo de su fachada atlántica "llegan muchos barcos" de todo el mundo.
A pesar de que la variante india "es una cepa que nos preocupa" tras confirmarse cuatro casos en un buque que llegó hace unos días al puerto de Vigo, según el presidente gallego, la variante británica continúa siendo, por ahora, la mayoritaria en Galicia.