Funespaña sigue adelante con su proyecto de crematorio para San Mauro. Así lo ha trasladado este miércoles el subdirector general de la empresa, José Vicente Aparicio. "Nunca hemos dicho lo contrario", afirmó tras la reunión que mantuvo con miembros de la plataforma NON Crematorios Pontevedra Leste y los portavoces de Partido Popular, PSdeG-PSOE, Marea y Ciudadanos. A dicho encuentro no acudió nadie en nombre del gobierno municipal.
Su tramitación "va más lento de lo deseable", reconoció el directivo de la empresa ya que "por nosotros le hubiésemos puesto un turbo". Funespaña esperaba, señaló, haber empezado a construir sus nuevas instalaciones en Pontevedra este mismo año, pero los trámites administrativos y el informe que tiene que emitir la Xunta de Galicia se lo han impedido. "Llevamos doce años con esto", lamentó.
En todo caso, José Vicente Aparicio avanzó que Funespaña estaría dispuesta a negociar otras alternativas, vía permuta de terrenos, pero aseguró que dichas propuestas "no tiene que presentarlas la empresa". Hasta ahora "no hemos recibido ninguna" y si llegan en un futuro "las analizaremos para decidir si son interesantes y nos permite realizar el proyecto que queremos". Eso sí, reiteró que "sin nada concreto delante no podemos decidir".
En San Mauro se contempla "otro nivel de servicios" más allá de un mero crematorio, explicó el directivo de la firma funeraria. Proyectan crear "espacios de servicios conjuntos" que incluirían salas de atención a las familias, tanatorios, salas de ceremonia "para que cada cual personalice el rito o la despedida como lo quiera realizar" y, por supuesto, un crematorio que tendrá que cumplir, dijo, una normativa ambiental cada vez más exigente.
Pero de cara a esa posible permuta, Aparicio señaló que el proyecto por el que apuesta Funespaña solo sería posible en las proximidades de un cementerio porque realizar la atención a las familias en un lugar para luego trasladarse a otro donde esté situado el horno crematorio provocaría "incomodidades" en un momento en el que los familiares del fallecido "están emocionalmente rotos y sin ganas de moverse".
VECINOS Y OPOSICIÓN BUSCARÁN ALTERNATIVAS
Con respecto a estas posibles alternativas, tanto los vecinos como los partidos de la oposición adquirieron el compromiso de buscar una localización alternativa para este proyecto, a pesar de reconocer que con las exigencias que plantea la empresa y la normativa aprobada actualmente en Pontevedra no será fácil. En todo caso, desde la plataforma vecinal aseguran que "se hai vontade consíguense as cousas".
Los vecinos lamentan que "estamos abandonados" por el gobierno municipal y le piden que sean ellos quienes busquen dichas alternativas "que as hai", ya que avanzan que "non vamos a permitir que se constrúa alí o crematorio", y harán un control constante de las obras que vayan a realizar. "Queremos vivir en paz", aseguraron tras la reunión, en la que criticaron la ausencia del alcalde o de algún miembro del BNG.
El más escéptico sobre esta posible salida es el portavoz socialista, Agustín Fernández, que mantuvo la postura que el PSdeG-PSOE tiene desde el año 2009 sobre este asunto. "Estamos a favor do crematorio", afirmó el edil, ya que entiende que es un servicio "absolutamente necesario" para Pontevedra y que la ubicación elegida, al lado del cementerio, es "razonable". Aun así afirmó que "se hai negociacións para outra alternativa, non vamos a interferir".
Con todo, Fernández entiende que "a estas alturas da película" pensar en cambiar de localización para este proyecto es "complicado" y afirma que políticamente "se pode entender que sacamos o problema dun sitio para levalo a outro" y reiteró que "nós apostamos por esa ubicación, votamos por ela e seguimos crendo que é a mellor".