Siete alcaldes del interior de las provincias de Pontevedra y Ourense han formado este miércoles un frente común para exigir al Gobierno la reforma integral de la N-541, lugar del trágico siniestro del autobús accidentado en Nochebuena.
Este 'Pacto de Pedre', en referencia a la localidad en la que perdieron la vida siete de los pasajeros del autocar que se precipitó al río Lérez, ha sido impulsado por el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, muy crítico con el estado de esta vía.
A él se han sumado los regidores de los municipios ourensanos de Boborás, Patricia Torres; Beariz, Manuel Prado; Punxín, Manuel Vázquez; Maside, José Manuel Iglesias; O Carballiño, José Fumega; y O Irixo, Manuel Cedeira, que también atraviesa la N-541.
En la primera reunión de este foro también han participado representantes de los ayuntamientos de Ourense y Pontevedra, que han optado por apoyar esta reivindicación pero no firmar el pacto inicialmente para ceder el protagonismo a los municipios del interior.
La única que no asistió a este encuentro, a pesar de haber sido invitada, fue la alcaldesa de Forcarei, Verónica Pichel, según lamentan los impulsores del foro.
"Estamos muy ilusionados porque todos opinamos lo mismo y creemos que esta es la mejor manera de que se nos escuche y nos atiendan en Madrid", ha sostenido Cubela, que ha apostado por ser "proactivos y constructivos" e impulsar "políticas de altura".
En el foro, ha recordado el regidor de Cerdedo-Cotobade, hay alcaldes "de todos los colores" preocupados por el estado en el que se encuentra esta carretera nacional "que vertebra gran parte del territorio gallego y sirve de unión con la Meseta".
La N-541 es un canal de comunicación "vital" para el interior de Galicia, subraya el alcalde cotobadés, que defiende que debe tener un mejor tratamiento por su importancia "estratégica" y por soportar un volumen de tráfico "ingente".
El manifiesto firmado este miércoles denuncia que la carretera presenta un nivel de conservación "preocupante" y necesita una intervención integral que renueve por completo su capa de rodadura, mejore los accesos a los núcleos poblados y refuerce la seguridad vial.
Entre los seis puntos de esta declaración de intenciones, los firmantes se comprometen a reclamar la reforma de la N-541 ante los diferentes organismos del Gobierno y a convertir este foro en un espacio de reivindicación conjunto en la "defensa activa" de sus territorios.
A este respecto, demandarán la redacción de los proyectos necesarios para dotar a la N-541 de un nuevo pavimento, renovar la señalización viaria o crear nuevos enlaces con carreteras secundarias que, en estos momentos, se encuentran aisladas de esta vía.
Una de sus primeras acciones será impulsar una proposición no de ley que recoja el planteamiento conjunto de estos nueve ayuntamientos y recabar los apoyos de los grupos políticos presentes en el Parlamento gallego, el Congreso de los Diputados y el Senado.