Fiscalía pide dos años y nueve meses de prisión para una mujer por agredir a su pareja y a un agente: "Ni guardia civil ni mierda"

Pontevedra
30 de marzo 2025
Actualizada: 8:40

A consecuencia de las agresiones, el agente sufrió diferentes lesiones en las extremidades que incluso precisaron de intervención quirúrgica y le dejaron secuelas

Audiencia provincial de Pontevedra
Audiencia provincial de Pontevedra / Mónica Patxot

La Fiscalía pide una condena de nueve meses de prisión por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia doméstica y dos años por el delito de atentado contra la autoridad, para una mujer acusada de agredir a su pareja y a un agente de la Guardia Civil que intentó mediar.

El juicio ha sido señalado por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra para el próximo jueves día 3 de abril.

El escrito de acusación de la Fiscalía explica que los hechos que se van a juzgar sucedieron el 18 de agosto de 2022, sobre las 23.30 horas, cuando la acusada se encontraba con su pareja en la hamburguesería A Meiga, de Cangas.

Según el relato del Ministerio Público, la acusada se mostraba agresiva y, "con ánimo de menoscabar la integridad" de su novio, "lo agredió reiteradamente con arañazos y patadas".

En ese momento, un agente de la Guardia Civil que se encontraba fuera de servicio decidió intervenir para mediar. Tras identificarse y mostrar su placa, la acusada le dijo "ni guardia civil ni mierda, hijo de la gran puta, déjame en paz, ojalá te mueras tú y toda tu familia, como te toque te juro que te mato".

Y, además de los insultos, golpeó al agente en el cuerpo mientras este procedió a sujetar a la acusada y la redujo. Cuando la mujer ya parecía tranquila la incorporó y ella aprovechó para arañarlo y golpearlo de nuevo con patadas.

A consecuencia de estos hechos, el agente sufrió diferentes lesiones en las extremidades que incluso precisaron de intervención quirúrgica y le dejaron secuelas.

Además de los dos años y nueve meses de prisión, la Fiscalía también solicita al tribunal que le imponga a la procesada la prohibición de aproximarse a una distancia inferior a 150 metros de su pareja, así como de comunicarse con él por cualquier medio durante dos años.

En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público demanda que la acusada indemnice al agente con 12.000 euros por el tiempo que tardaron en curar sus lesiones, 750 euros por la intervención quirúrgica y 3.400 por las secuelas psicofísicas y perjuicio estético, así como 4.500 euros por perjuicio moral. Su pareja renunció a reclamar la indemnización que pudiese corresponderle por estos hechos.