Marín ha vuelto a ser uno de los grandes referentes de la celebración del Samaín.
Lo ha logrado con una nueva edición del Samaín Briz, que ha vuelto a convertir este espacio urbano en un auténtico parque del terror con actividades para todos los públicos.
Toda la finca se ha transformado en un aterrador escenario, lleno de sustos y diversión.
Ha estado presidida por dos túneles del terror: "Hotel Terror Cañeiro", coordinado por la comparsa Os da Caña, y "O Taller Esquecido", a cargo del Club Deportivo La Peña.
Además, repartidas por todo el espacio se ambientaron cuatro estaciones de miedo, de acceso libre para el público, en las que han colaborado, entre otros, la comparsa Val do Lérez, Cor Café y As Sonecas.
Fueron el convento del terror, el manicomio de la muerte, la cueva del asustador y un peligroso colegio lleno de criaturas extrañas.
La jornada se completó con espectáculos en el lago central, ambientación musical y puestos de comida y bebida para que los asistentes pudieran tomarse un respiro.
Para los más pequeños de la casa y para disfrutar en familia estuvo habilitadatambién la zona del PequeSamaín, con pintacaras, juegos, animación o baile.