"No estamos contra los coches... es más, a los pontevedreses nos gustan los coches, tenemos un altísimo índice de motorización. Son un invento estupendo pero tenemos que situarlos donde no hagan daño a nuestras ciudades. Amamos los coches pero cada uno en su sitio". Así puntualizaba el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, ante las preguntas de un participante en un seminario universitario en el que era poniente principal, sobre qué pensarían los fabricantes de coches ante su apuesta de ciudad.
Ocurría en la última sesión de trabajo de la misión pontevedresa a México, en el seminario "Datos que transforman" del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), una exclusiva institución académica privada con dos prestigiosos campus en la capital azteca, cuna de líderes políticos y un referente en los temas de gobernanza y políticas públicas del país. Allí fue presentado por el director del seminario, Seth Pérez, y el secretario técnico de la Comisión de Desarrollo Urbano del Senado de la República, Fernando Cota.
Fue precisamente Cota quien argumentó ante los asistentes que el tamaño de la ciudad carecía de importancia para lograr mejores espacios urbanos: "Pontevedra tiene la misma densidad de población o incluso más que Queens, Benito Juárez o el Bronx, por lo que las recetas pueden ser aplicadas en cualquier lugar".
Definió el modelo como idóneo por preservar y potenciar su carácter compacto, por promover la ciudad de usos mixtos -residir, trabajar, comprar- y por resultar caminable para realizar la mayoría de las actividades humanas, inspiraciones que animaron las leyes que el Senado aprobó en 2016 para todo México.
Sin embargo, surgió como es habitual - especialmente en México, donde existen muchas ciudades con una población superior al millón de personas- la pregunta sobre el tamaño de la ciudad: "¿Qué haría usted, alcalde, en una ciudad de esta dimensión?".
La respuesta de Lores fue la zonificación: "Ciudades tan grandes pueden tener varios centros y seguro que sería necesario actuar en barrios o colonias, creando núcleos de centralidad particulares con servicios propios y equipaciones suficientes para vivir sin grandes desplazamientos, pero en cualquier caso, la receta es la misma: menos coches, más espacio público, accesibilidad...".
En la clausura formal del seminario participó también el ex alcalde de Mérida, quien abogó por permitir la reelección de los alcaldes, ya que México es el único país de Latinoamérica que impedía repetir mandatos y la próxima elección será la primera vez que puedan candidatarse los actuales, sólo por un período de tres años.