Estudios de España, Reino Unido, Japón, Alemania, Portugal, Noruega o Dinamarca, interesados en Santa Clara

Pontevedra
26 de enero 2023

Felices y "gratamente sorprendidos". A pesar de que los criterios eran "moi ambiciosos e esixentes", la rehabilitación del convento de Santa Clara, que se integrará en el Museo de Pontevedra, ha despertado el interés de estudios de arquitectura de todo el mundo

Convento de Santa Clara Mónica Patxot

Felices y "gratamente sorprendidos". A pesar de que los criterios eran "moi ambiciosos e esixentes", la rehabilitación del convento de Santa Clara, que se integrará en el Museo de Pontevedra, ha despertado el interés de estudios de arquitectura de todo el mundo.

Así lo han destacado este jueves los máximos responsables de la Deputación de Pontevedra, Carmela Silva y César Mosquera, que han revelado que 41 estudios profesionales, agrupados en hasta 23 propuestas, participarán en el concurso convocado para reformar Santa Clara. 

Todos ellos, según el vicepresidente provincial, cuentan en su currículo con obras de "enorme calidade" y están liderados por grandes nombres de la arquitectura mundial y por estudios emergentes que, en este momento, "están na cresta da ola".

La mayoría de los estudios presentados (33) son españoles. Madrid (13) y A Coruña (6) son las dos principales ciudades de las que proceden los aspirantes, junto con Barcelona (3), Pamplona (3), Pontevedra (2) o Santiago (2). Hay también propuestas desde Sevilla o Valladolid.

De fuera de nuestras fronteras llegaron porfolios desde Londres (Reino Unido), Braga (Portugal), Rotterdam (Países Bajos), Berlín (Alemania), Oslo (Noruega), Copenhage (Dinamarca) o Tokio (Japón). Además, uno de los aspirantes afincados en Barcelona es italiano. 

"Estamos poñendo o Museo de Pontevedra no centro das grandes actuacións museísticas a nivel nacional e internacional", ha destacado la presidenta de la Deputación.

Entre los nombres propios que se han presentado a esta primera fase del concurso para redactar el anteproyecto de la obra, se encuentran profesionales de la talla de los británicos David Chipperfield y Amanda Levete, el japonés Kengo Kuma, el italiano Fabrizio Barozzi, el neerlandés Kees Kaan, el colectivo danés BIG Architects o el estudio noruego Snøhetta.

Los españoles Francisco Mangado, Jordi Garcés, César Portela, Luis Enguita y Paloma Lasso de la Vega o Enrique Sobejano y Fuensanta Nieto, todos ellos con emblemáticas y reconocidas obras por todo el mundo, optan también a este ambicioso proyecto. 

CINCO SERÁN SELECCIONADAS

¿Y cómo será la primera criba? Los técnicos provinciales revisarán cada una de las propuestas, muchas de ellas presentadas en forma de UTE, y comprobarán que cumplen los requisitos recogidos en las bases de la convocatoria del concurso.

De todas ellas escogerán cinco finalistas. Los nombres se conocerán en un plazo aproximado de dos semanas. A partir de ahí, cada estudio tendrá tres meses para redactar el anteproyecto de la reforma de Santa Clara y un jurado profesional elegirá a la ganadora.

Si se cumplen las previsiones de la Deputación de Pontevedra, este proceso debería culminar antes del próximo verano. Los arquitectos seleccionados deberán elaborar el proyecto final y serán los responsables de la dirección de obra durante todo el proceso.

Con el calendario en la mano, si no se producen retrasos, el gobierno provincial espera licitar esta rehabilitación, que supondrá una inversión de 24 millones de euros, a finales de 2023 y tenerla adjudicada a la compañía constructora en primavera de 2024.

Al estimarse que las obras durarán unos dos años, Santa Clara podría estrenar su nueva imagen a mediados de 2026. Eso sí, Silva y Mosquera advierten que estas previsiones son un "brinde ao sol" al depender de permisos y trámites ajenos a la propia Deputación.

Lo que ambos dirigentes han dejado claro es que la rehabilitación del antiguo convento pontevedrés "será unha realidade si ou si", porque la institución provincial tiene un "compromiso total" con esta actuación.

Confían en obtener el respaldo económico de la Xunta, el Estado y Europa porque "sería pouco explicable que non o houbera", ha sostenido Carmela Silva. Pero ha asegurado que, si no es así, lo asumiría la Deputación con fondos propios "aínda que teñamos que facelo por fases".