El Grupo Ence "retrasará hasta final de año" la decisión final sobre las inversiones en su fábrica de Pontevedra ya que están "sujetas a la aprobación de permisos por las autoridades", por lo que los responsables de la pastera esperarán a tener esos permisos.
De modo que habrá que esperar a 2017, según señala la compañía de energía y celulosa en la presentación de sus resultados del primer trimestre remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En la presentación remitida al organismo supervisor, la compañía incluye en su plan estratégico unas inversiones de 135 millones de euros en la fábrica de Lourizán, que se reparten entre mejoras de eficiencia y aumento de capacidad (30 millones de euros), una nueva depuradora de agua (15 millones de euros), mejoras medioambientales (12 millones de euros), un proyecto de integración paisajística (4 millones de euros) y la instalación de una planta biomasa de 31 megavatios (74 millones de euros).
"DESMEDIDA POLITIZACIÓN DE LA CONCESIÓN"
La compañía considera que "la actual situación parlamentaria" está provocando una "desmedida politización de la concesión" y recalca que el procedimiento de renovación de la misma ha seguido "rigurosamente" los trámites legales.
"La proposición no de ley en el ordenamiento jurídico español es una proclamación política, sin efectos jurídicos ni vinculantes para el Gobierno", indica la compañía.