El X Encontro Internacional de Palilleiras de Portonovo, organizado por la Asociación de Mulleres Rurais Santa Catalina de Portonovo y con colaboración de la agrupación As Bolboretas tendrá lugar este domingo 2 de abril durante todo el día, y llega con expectativas de superar las cifras de asistencia del año pasado.
Este encuentro surgió con la Festa da Raia, allá por el 2007. En sus inicios solo se celebraba una sesión de tarde y aprovechando la carpa de la Raia tenía lugar al fin de semana siguiente o al anterior. Los primeros años, la profesora Teresa Lozano, que además de enseñar en Portonovo tiene dos cursos y da en más sitios como Raxó, Pontevedra y O Grove, "era ella quien se encargaba de juntar a la gente" nos explica Teresa Torres, palilleira de Portonovo y perteneciente a la asociación. "Cuando vimos la buena acogida que tuvo, decidimos entonces que queríamos todo el día y fuimos de nuevo al ayuntamiento. Es una forma de promocionar Portonovo y es dinero que se queda en el pueblo", asegura. En la organización colaboran prácticamente todos los locales de Portonovo y Sanxenxo.
La gran respuesta lograda en la cita anterior ha llevado a hacer esta convocatoria internacional, y esperan que acuda gente de las cuatro provincias de Galicia, de Madrid, y de lugares tan distantes como Salamanca, Murcia o Portugal. Enviaron alrededor de cien invitaciones, y de nuevo por imposibilidad de albergar a más participantes, tuvo que cerrarse ya el plazo de inscripción. "Nos da muchísima pena cerrarlo, hemos tenido que dejar a cientos de personas fuera", afirma Teresa. Una de las razones es que la carpa es más pequeña que en años anteriores. Y debido a que para palillar hay que estar cómodo y "hubo gente que protestó porque estuvieron muy apretadas" este año, de las 722 palilleiras sentadas de la edición anterior, este año serán solo unas 680.
Para este evento en la asociación llevan trabajando desde enero, nos cuenta Teresa. Y estarán desde el viernes hasta el domingo muy temprano preparándolo todo para recibir a los visitantes. Esperan superar con creces las cifras del año pasado y calculan que acudirán alrededor de 1.000 personas este fin de semana a Portonovo. "Porque al encuentro no solo acuden las palilleiras, también vienen los puestos de venta, más toda la gente que viene detrás, desde familias a asociaciones."
Cada año como ya es costumbre, obsequian tanto a las profesoras como a cada palilleira con un regalo por asistir. El año pasado dieron a cada palilleira dos bolillos negros, y hace dos años un separador y un bolillo grabado con la edición de la palillada, explica Teresa. Para este darán un imán, que es "muy útil" para cuando te caen los alfileres al suelo y tienes que recogerlos. En los puestos se venderán cosas relacionadas con la labor, como bolillos, separadores, hilos, almohadillas o alfileres.
La carpa este año se va a situar en el exterior de la piscina municipal, y dará comienzo a las 10.00 horas. Contarán con la actuación de Os Gatiños de Portonovo por la mañana y por la tarde con el actor de Portonovo Hugo Andrade, del Teatro Laranxo.
Alrededor de 1.000 personas acudirán este fin de semana a Portonovo
Desde la asociación organizan un sorteo en el que colaboran los comercios de la zona, "les pedimos un detalle para el sorteo y nadie nos dice que no", según Teresa. En esta reunión de palilleiras que es una forma de compartir experiencias "y promocionar nuestra artesanía" el público asistente puede observar de cerca cómo es el encaje de bolillos y disfrutar además de la exposición de los trabajos de las palilleiras, desde mantelerías, juegos de cama, colchas, juegos de cama, hasta pulseras, abanicos o ligas de novia.
Teresa Torres empezó en el oficio hará unos 17 años y a día de hoy sigue yendo al curso que imparte la profesora Teresa Lozano en Portonovo todos los lunes por la tarde. "Nunca terminas de aprender", según nos cuenta. Empezó porque le gustaba el labor y para ella es "como un hobby", al que le dedica los ratos libres. Al principio lo importante es coger soltura con los dedos, y después empiezas con el medio punto, el punto doble y así van sumando cada vez más dificultad.
A diferencia de la calceta, señala, "aquí no ves progresos inmediatos". Es un proceso muy lento, y muchas veces la gente no ve todas las horas de trabajo que hay detrás. Una de las cosas más llamativas de esta labor es que no hay nudos hasta que se acaba y se trabaja con los bolillos por pares. "A lo mejor una pieza puede tener 12, 50 o incluso 100 bolillos", apunta. Actualmente está trabajando en una liga de novia, y lleva desde enero con ella y todavía no la ha acabado. De ahí que sea muy difícil ponerle un precio, "¿cuánto vas a cobrar?", pregunta Teresa con cara de duda. Estas piezas no son para todos los bolsillos "porque es artesanía, son piezas que no tienen que ver con las que se fabrican industrialmente."
Los oficios tradicionales, "afectados por el desinterés de las nuevas generaciones" están al borde de la extinción si no fuera por la labor de asociaciones y encuentros que como el que tendrá lugar este domingo en Portonovo ayudan a promocionar "esta desconocida oficio". Mientras haya gente a la que le guste, "no desaparecerá."