La portavoz del Gobierno Local, Anabel Gulías, ha señalado que el traslado del mercadillo ambulante "débese tratar con tranquilidade".
Preguntada por los periodistas durante una rueda de prensa celebrada este lunes, Anabel Gulías ha destacado que "no Goberno temos a mesma opinión" y es que la reubicación de la feria ambulante en un nuevo emplazamiento "ten moitísima complexidade".
La portavoz ha indicado que antes de tomar una decisión definitiva "é necesario facer os estudos pertinentes e os informes", en los que se tengan en cuenta cuestiones como la movilidad de los residentes de la zona afectada, de la ciudadanía y de los propios vendedores.
Así, ha puesto como ejemplo que "unha localización que parecía boa en inicio como Arcebispo Malvar despois atopouse con problemas de espazo, a necesaria convivencia cos garaxes ou cos establecementos hostaleiros e hostaleiros que se atopan na zona".
El mercadillo de Rafael Areses cuenta con 89 puestos disponibles, de los que 34 están vacantes, mientras que el que se celebra en Estribela dispone de 56 puestos, de los que 26 están libres.
Anabel Gulías ha hecho referencia a este asunto después de anunciar que la Xunta de Goberno Local aprobó este lunes la nueva Ordenanza Reguladora de Venta Ambulante del Concello de Pontevedra.
La portavoz del Gobierno Local ha explicado que "se trata do inicio do proxecto de ordenanza" que ahora irá a Pleno para su aprobación inicial y, a partir de ahí, se someterá a un proceso de consulta, se elaborarán los informes pertinentes, completando así todos los trámites administrativos antes de su aprobación definitiva por parte del Pleno.
El reglamento vigente es del año 1997 y quedó obsoleto. Entre las novedades introducidas se incluyen la admisión de los cambios de titularidad de los puestos, que dejarán de ser personales e intransferibles, y la eliminación de los anteriores criterios de adjudicación basados en la antigüedad reiterada de un espacio, siendo a partir de ahora la convocatoria de licitación la que indique los criterios que se aplicarán para la adjudicación de las autorizaciones, en régimen de concurrencia competitiva.
También regula los productos autorizados y prohibidos, estableciendo qué tipo de artículos se permitirá vender cuando se autorice el montaje de los mercados de antigüedades y segunda mano.